“El mundo sería aburrido y triste sin colores…”, dice una canción del grupo de pop latino “Bacilos”. Teniendo en cuenta esta propuesta es muy probable entonces que San Luis se haya convertido en una provincia divertida y feliz. O por lo menos así la definen los turistas que se acercan, desde hace un par de días al artista plástico, Mario Lange, para dejar su corazón dibujado en el murallón de La Florida. La actividad, que pertenece al plan “Pinta bien, pinta San Luis”, continuará, por lo menos, hasta dentro de quince días más y la invitación está dirigida a todos los que deseen dejar cualquier mensaje, su nombre o sus iniciales.
“Ésta es una súper pintada en la que la gente puede interactuar con nosotros, les damos los pinceles y eligen los colores. Tienen fucsia, amarillo, naranja, celeste, verde y lila. La única consigna es que lo que escriban sea dentro de los corazones”, explicó Lange mientras se acercaba a los trabajos. Tenía puesto un delantal negro, repleto de pinceladas de diferentes tonalidades, y un tachito de pintura azul en sus manos.
En uno de los espacios más alejados del grupo, había una familia de San Martín de Buenos Aires (foto). “Mis tres hijas están dibujando nuestros corazones, son seis porque la mamá, o sea mi señora, está embarazada” dijo Cristian Acosta, y su esposa Virginia agregó: “Me encanta esta iniciativa, porque resalta y hace un contraste divino con la naturaleza”.
En La Florida estaba nublado y el artista plástico recorría los primeros trescientos metros del puente atento a las necesidades de los visitantes. “Están todos fascinados, la idea está muy buena. Ellos dejan un colorido genial dentro de este paisaje tan lindo compuesto por el agua y el verde, las pinturas le dan un toque de arte a la naturaleza”, expresó.
Aún quedan 1.700 metros por pintar, Lange sacó cuentas mentales y se animó a confirmar que estarán avocados a colorear el puente quince días más. “La gente puede venir todos los días a cualquier hora. Durante el fin de semana también pueden hacerlo porque siempre habrá gente con pinceles y pinturas esperándolos”, afirmó.
En diferentes sectores de la estructura de cemento había grupitos de familiares que pensaban qué poner dentro de los corazones. Algunos decidían simplemente dejar sus nombres o iniciales, otros se animaban a dejar pedacitos de letras de canciones, fechas importantes o frases. Todos lo hicieron con la idea de volver para recordar este pequeño momento.
“Creímos que llenar de corazones el murallón, nos iba a llevar por lo menos un mes, pero se está completando muy rápido. Aquí estaremos por estos días, el viernes dejaremos listos los espacios para que la gente le ponga su amor y ya el lunes seguiremos por el puente que sigue”, especificó el artista que tiene su atelier en Estancia Grande y en el que dicta talleres.
“Esta hermosa actividad es para toda la familia. Hacemos esto para que en el país conozcan San Luis, considero que es una manera distinta de mostrarnos, además a la gente le gusta que sea a través de lo artístico”, concluyó el dueño de las pinceladas multicolor.
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