Son conocidas y reiteradas las quejas por la atención que reciben los jubilados en el Ramos Mejía. Pero si tiene la mala suerte de enfermarse un fin de semana y tener que llegar a la clínica de avenida Illia por una urgencia en búsqueda de atención médica deberá armarse de mucha paciencia: desde hace un tiempo la guardia es atendida por un médico de 86 años, que sin desmerecer su capacidad profesional, rápidamente se encuentra desbordado por los necesidades de los pacientes, la mayoría más jóvenes que él.
Sumando a que Juan Nobilta, el médico en cuestión, viene a atender a San Luis desde Mendoza, por la falta de profesionales en la provincia dispuestos a prestar servicio en esa clínica.
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