"Estoy planeando cómo será la nueva etapa de crecimiento de San Luis"

— ¿Con qué San Luis se ha encontrado en sus recorridos por la provincia? 
—Hay un San Luis que tiene  necesidad de que le escuchen sus proyectos. Y la mayoría de los proyectos son en beneficio de toda la comunidad. Hay un crecimiento en la formación cívica de los ciudadanos. Por ejemplo: en Justo Daract, que es una sociedad que se siente postergada y dependiente de Villa Mercedes, lo más generalizado fueron planteos en defensa de la cultura, del deporte, de la educación. Un pedido muy interesante fue el de cambiar de lugar la terminal. Ése fue un buen planteo que ya fue recepcionado por el Gobierno: quieren sacar la vieja terminal del centro de la ciudad y llevarla a la autopista, donde hay un edificio que no se usa. Entonces si la terminal de ómnibus funciona sobre la autopista, la mayoría de las empresas de transporte que pasan por la ciudad seguramente pueden contemplar la posibilidad de parar en Justo Daract. Eso generaría una enorme actividad novedosa para atender las necesidades de los viajeros: un desayuno, un remedio, una artesanía.  Es una buena idea que no cuesta mucha plata y que traerá beneficios. El mismo espíritu encontré en La Toma, donde también se plantearon temas de la cultura, el deporte, el desarrollo turístico. El turismo es una gran actividad que genera fuentes de trabajo.

—¿A San Luis le falta asumir las nuevas formas de desarrollo basadas en servicios, como por ejemplo el turismo? 
—Yo diría que la provincia ha entrado en otra etapa. El turismo ha sido siempre valorado como fuente de recursos y crecimiento. Lo que no encontrábamos eran los caminos. El Hotel Potrero fue diseñado en los años 70 e inaugurado en el año 1985. Es decir, que el turismo se manejaba con interés pero a pasos muy lentos. Y desde que el hotel abrió las puertas hasta que se consolidó como atracción turística, pasaron 10 años.  Y el desarrollo turístico urbano de Potrero es de estos últimos años. Creo que estamos pasando etapas de un turismo más precario a uno más importante y lo hacemos cada vez más rápido. Merlo con la inauguración del nuevo hotel cinco estrellas, tiene un salto de calidad. Pero veo que toda la provincia, desde el dique San Felipe hasta la ribera del Río V aspira a transformase en atractivos turísticos. 

—En estas últimas semanas se ha visto la intención de la gente de presentar proyectos deportivos, culturales, turísticos. ¿Hay un mejor oído del Gobierno para escuchar esas propuestas? 
—El Gobierno está en la buena senda y el plan estratégico es muy bueno. El Gobernador hace un esfuerzo enorme por solucionar problemas y generar progreso en la provincia. Pero creo que en algunos casos fallan las estructuras del Estado y hay que modificarlas. Creo que en algunas estructuras del Estado se cierran las puertas o les encanta decir que “no” y ponen trabas para que la gente no pueda acceder. Por ejemplo: el plan de viviendas que hemos hecho (y hablo en plural porque he contribuido en la línea estratégica), consiste en volver, con la mente del siglo XXI, a la exitosa política de vivienda que trazamos en nuestro gobierno. Esa política es sin exclusiones. Todo ciudadano se puede inscribir. Yo pedí que no fuera la inscripción en papel, en una oficina, porque en las oficinas empiezan a pedir requisitos secundarios y, por ejemplo, la gente empieza a decir que no se puede inscribir porque no tiene tal o cual papel. Por internet tiene la ventaja de que cualquiera se puede inscribir y que una vez aceptada se pasará a la siguiente etapa, donde se efectuará un llamado y le pedirán que lleve los certificados correspondientes. Por eso digo que las estructuras tienen que cambiar y no puede ser que no se entienda, que no se permita que la gente se inscriba, por ejemplo, en las viviendas.  

- Adolfo sobre el Precio San Luis y el impulso a los emprendedores:

- Adolfo sobre la salud en la Provincia:

- Adolfo sobre los jóvenes, el acuerdo programático y la situación de Cambiemos:

- Adolfo sobre Macri, el Gobierno nacional y la pobreza:

Leé la nota completa en la edición impresa de El Diario de la República de este domingo