Mujeres manejan el 80% de las cámaras de seguridad

Desde hace tiempo, el Gobierno de San Luis apostó fuerte por la incorporación de tecnología en pos de la seguridad. Y la colocación de videocámaras de vigilancia en distintos puntos del territorio es una estrategia clave. Ese foco confluye en tres centros de monitoreo ubicados en Merlo, Villa Mercedes y el principal, que funciona en Terrazas del Portezuelo, donde también funciona el servicio de emergencias 911 y el Servicio de Emergencias Médicas Provinciales (Sempro).  

Sin embargo, lo más distintivo es que el 80% de los operadores de las cámaras de videovigilancia son mujeres, cuyo desempeño, por concentración, intuición y su detallada labor, las convirtió en el grupo idóneo para la función.

“El 80 por ciento de nuestros operadores son mujeres, predominan ellas. Se dio así. En las contrataciones se dio que el perfil de las mujeres nos ayudó a tener otra visión en el trabajo. Entre los coordinadores también predominarán las mujeres. Tienen algo, otra visión, son más puntillosas más detallistas y eso nos dio muy buenos resultados", destacó el gerente del Centro de Monitoreo de Terrazas, Ariel Hauría, durante la visita que hizo el ministro de Seguridad, Diego González, por las instalaciones.

En el edificio, además del monitoreo de las cámaras de videovigilancia, convergen las comunicaciones al 911 y el control de los vehículos oficiales. "Cuando los operadores detectan una situación anómala, que necesite presencia policial, activan un protocolo que ejerce la Policía y ambulancias, si es necesaria su presencia. Es una herramienta de soporte para la Policía y la Justicia", añadió.

En total, la provincia cuenta con 510 videocámaras en pleno funcionamiento. En lo que va de 2018 el rendimiento de los operadores fue notable. Según Hauría, recibieron 500.000 llamadas al 911 y los vigiladores hicieron 14.000 observaciones de las que 13.000 fueron preventivas. A su vez, en el año entregaron 3.000 pruebas fílmicas a la Justicia y a la Policía para que trabajen en su etapa de instrucción al igual que los audios al 911.

“Nosotros desde Terrazas observamos La Punta, ciudad de San Luis, Juana Koslay, Quines, San Francisco y Luján. También tenemos centros en Merlo y Villa Mercedes, pero de ser necesario, podemos ver la totalidad de cámaras de la provincia", sostuvo el funcionario.

Con los héroes anónimos

En la charla con El Diario de la República, González se refirió a la tarea de los operadores de las videocámaras de seguridad y al aporte que otorga la tecnología en materia de seguridad.

“Queríamos, antes de finalizar el año, venir y saludar a los operadores, saber sus nombres porque son casi héroes anónimos y por ahí la gente no sabe que todo comienza aquí. Este es el primer lugar de respuesta ante una emergencia. Quisimos agradecerle a cada uno de los operadores, por su tarea abnegada, sacrificada, porque realmente hay que estar en un trabajo así y atender las llamadas por las distintas situaciones que lo conmueven a uno. Estamos muy orgullosos como ciudadanos y agradecidos al Ministerio de Ciencia y Tecnología, en la persona de Ariel Hauría, con quien trabajamos maravillosamente. Es un integrante más de nuestro equipo”, sostuvo tras saludar y charlar con los trabajadores del centro.

“Los resultados que obtenemos a través del Centro de Monitoreo, que a veces no son públicos porque integran causas judiciales, forman parte de expedientes o porque así es el protocolo, son muy satisfactorios. Aquí funcionan el seguimiento de nuestras cámaras de videovigilancia, el 911 y la mirada sobre los vehículos oficiales”, afirmó el funcionario.

“Nuestras cámaras nos permiten maximizar el esfuerzo que hace el Gobierno de la Provincia, a través del Ministerio de Seguridad y la Policía, para incrementar la prevención y profundizar el efecto disuasorio a los fines de prevenir el delito. Son políticas centrales del Gobierno de San Luis. Realmente, sin esta tecnología, sería mucho más complicado todo. ¿Antes cuál era la respuesta?, teníamos que golpear una puerta, preguntar a los vecinos e investigar. Ahora contamos con las imágenes y las obtenemos en minutos. Eso facilita la tarea policial en la etapa de instrucción y ayuda muchísimo a las investigaciones y a la Justicia. Todo está respaldado por protocolos y eso hace que la labor sea positiva”, destacó González.