Aseba, a un paso de la A2
Le ganó 3-1 a Defensores de Viedma y se metió en la semifinal en Chapadmalal. Hoy, a las 10:30, se medirá con Fundatec de Tierra del Fuego, en busca de uno de los boletos para llegar a la A2.
Aseba tenía que ganar y lo hizo. Derrotó 3-1 a Defensores de Viedma (25/23, 25/22, 23/25 y 25/20) y se metió en la semifinal de la Liga B1 de vóley que se juega en Chapadmalal. Hoy a las 10:30 enfrenta a Fundatec. Si gana saca boleto a la A2. Si pierde tiene la chance de jugar por el tercer puesto que da el último boleto al ascenso.
La clave del triunfo estuvo en la defensa y en la recepción. El equipo defendió muy bien. Lo receptores hicieron un gran trabajo para que la pelota le llegara arriba de la cabeza a Jorge Quiroga, que de la magia de sus manos, elaboró las mejores jugadas que terminaron en el piso del campo rival.
El equipo está muy fuerte de la cabeza. Trabajó duro para esto. Nadie le regaló nada. Y eso se ve en la mirada de estos muchachos, que tienen ganas de conseguir algo histórico para el vóley masculino de San Luis. Están a un paso. Falta un partido para pegar ese salto de calidad que hace años persiguen.
Aseba y Defensores se conocían de la fase de grupos. El primer parcial empezó punto a punto, hasta que la escuadra de San Luis sacó una pequeña diferencia y después supo aguantarla. El segundo parcial fue un calco. Palo a palo, pero en el momento clave Aseba estuvo más certero y cerró la manga a su favor.
En el tercero el "Bancario" se relajó y le costó caro, porque los rionegrinos se lo llevaron por un apretado 25/23.
El último fue todo de Aseba. Al gran trabajo de la defensa se le sumó la excelente recepción. Quiroga, con la pelota más limpia, pudo armar como en los dos primeros sets y el equipo de San Luis se lo llevó por 25/20.
"Es algo único e irrepetible. Estamos a un paso de lograr el gran objetivo. La emoción está todavía a flor de piel", dijo un muy emocionado Jorge Quiroga, armador de un equipo que tiene un sueño de ascenso.
Luciano Marón, que desde los 11 años que juega en el club, al borde de las lágrimas dijo: "Estoy viviendo un sueño, se lo deseo a todo voleibolista. Estar tan cerca del ascenso con el equipo de mis amores, y con este grupo de amigos es algo único".
Hoy es el último paso para lograr el objetivo. Tiene dos posibilidades. Si gana la semi se mete. Si pierde, tendrá que ganar el juego por el tercer puesto. Pero al margen de lo que pase hoy, este grupo ya ganó. Son enormes muchachos.


Más Noticias