El gobierno nacional insiste con "retocar" las indemnizaciones

El Gobierno envió al Congreso tres capítulos del proyecto de reforma laboral que tendrían el visto bueno del sindicalismo en su parte principal, aunque también incluye una modificación en el cálculo de las indemnizaciones, resistida por sectores gremiales.
En un capítulo secundario, apartado de los tres puntos centrales del nuevo proyecto, el Gobierno propone excluir del cálculo indemnizatorio "el sueldo anual complementario (aguinaldo), los premios y/o bonificaciones, y toda compensación y/o reconocimiento de gastos que el empleador efectúe hacia el trabajador", según informó el portal del diario "La Nación".

Según explicaron voceros del Ministerio de Trabajo, la intención es "evitar discrecionalidad en el cálculo, en el que muchas veces se generan distorsiones e imprevisibilidad a la hora de tomar nuevos trabajadores". Incluso explican que "ahora se establecen con claridad los alcances".
Para "sustituir" la indemnización, la Casa Rosada impulsa la creación de un fondo de cese laboral, que debería ser constituido mediante convenio colectivo con el aval de las cámaras empresariales y el principal gremio de la actividad, y un aporte mensual por cuenta del empleador sobre un porcentaje del salario, más adicionales remunerativos y no remunerativos.

En diciembre el proyecto —enviado por el ministro de Trabajo Jorge Triaca junto a la reforma previsional— fue trabado por el Bloque Justicialista del Senado, por la resistencia de un sector de la CGT. Fue el camionero Pablo Moyano el que planteó la oposición más dura, al advertir que no permitirían "una nueva Banelco en el Senado", en alusión al escándalo de la reforma que impulsó en 2000 el gobierno de la Alianza.

Ante ese cuestionamiento, la bancada de senadores que preside Miguel Pichetto —cuyo respaldo es fundamental para el oficialismo— bloqueó el tratamiento del proyecto hasta que hubiera consenso en la central gremial.

Los puntos del nuevo proyecto

El nuevo texto refiere al blanqueo de trabajadores, el establecimiento de sistemas de pasantías y la creación de una agencia de evaluación de tecnología médica.

El plan para regularizar empleados en negro incluye la exención del pago de multas a los empresarios que blanqueen a sus trabajadores, y el reconocimiento del Estado de los aportes al sistema previsional por los años en los que el empleado haya estado en la informalidad. Además les reconoce a los empleados informales el escalafón y la antigüedad.

El segundo punto apunta a la capacitación laboral continua: que las pasantías sean una modalidad de capacitación y también busca reconvertir oficios que están cayendo en desuso.

El tercero crea la agencia de tecnología médica para reducir el nivel de litigiosidad en contra de las obras sociales sindicales.