De Concarán al Abierto de Palermo

Milagros Sánchez jugará el Albierto de Polo de Palermo. El torneo más importante del mundo, que reúne a las mejores del planeta, tendrá a la piba de Concarán que defenderá los colores de La Dolfina, equipo que ganó las dos ediciones que se disputaron hasta el momento. Mili compartirá elenco con Mía Cambiaso y con Mila y Cande Fernández Araujo. Será del 2 al 14 de diciembre.

La tercera fue la vencida. En la primera edición estuvo de suplente. En la segunda no pudo estar por motivos personales. Y ahora le llega la gran chance: jugar en la catedral del polo.

Milagros empezó de muy chica esta pasión. Su papá tiene un club: Los Sauces de Concarán. Ahí comenzó el romance con esta disciplina. Tenía seis años y ya montaba caballos y taqueaba. Fue pasando el tiempo, el amor creció y nunca más dejó de jugar.

Tiene 7 de hándicap y un talento inmenso. En esta temporada, con San Luis, logró el título argentino del  interior. El fin de semana pasado se consagró con Namuncurá La Martina, en la Copa de Oro en Pilar. No solamente paseó su jerarquía por Argentina, también tuvo la chance de jugar en el extranjero. Y se destacó.

Es perfil bajo. No le gustan muchas las notas ni los flashes. Se siente más cómoda y segura en un campo de polo. Ese es su hábitat natural. Cursa el primer año de Contador Público. Es familiera. Pasa mucho tiempo fuera de casa, ya sea por su deporte o por el estudio, pero siempre se hace un tiempito para estar cerca de mamá Marcela, de papá Juan Carlos y de su hermano Ezequiel.

A pesar de su corta edad tiene un buen recorrido en el polo. Jugó innumerables torneos, tuvo la gran chance de compartir cancha con Nina Clarkin —la mejor jugadora del mundo—.

"Todavía no caigo. Es algo increíble. Es el sueño de todo jugador, hombre o mujer. En la primera edición estuve de suplente, en la segunda estaba con el tema del egreso; y ahora me sale esta chance. Es una enorme responsabilidad, pero a la vez una linda oportunidad. Estoy ansiosa, pero confío en hacer bien las cosas", dijo Mili.

Habla con la misma seguridad con la que encara los mimbres. Puede jugar de 3 o de 4. Rinde donde la pongan. Sabe que está ante la gran oportunidad de su vida. Jugó en varios lugares, pero saltar a la cancha en Palermo, es algo especial, que los amantes del polo entienden a la perfección.

Cuando iba a ver los partidos que jugaba papá soñaba con esto, pero nunca pensó que le iba a llegar tan rápido. El fin de semana se quedó con la Copa de Oro en Pilar, pero el festejo, más que por este logro, fue por la convocatoria para jugar el Abierto.

De Concarán a Palermo. Así es Milagros Sánchez. Sin escalas previas. Derechito a la catedral del polo.