Cuando la edad es lo de menos: “Los Soñadores del Canto”

Alberto "Chacho" Miranda, José Manuel Pérez,  Juan Domingo Garro y María Elisa Garro, son cuatro músicos sanluiseños que componen el grupo "Los Soñadores del Canto", una agrupación folclórica que a no ser por la juventud de la única mujer del grupo, sería un trío de músicos de más de 70 años cada uno.

Las dedos mágicos de la mano izquierda de "Chacho" Miranda  van acariciando el diapasón de su guitarra, en tanto los de la derecha aprietan con fuerza y seguridad la primera y tercera cuerda y después la sexta marcando un acorde que solamente se puede escuchar en una guitarra bien templada y ante la atenta mirada de su compañeros recibe el "visto bueno".

La famosa "Zamba de mi esperanza" escrita en 1950 por el mendocino Luis Profili (Luis Morales) dice en una de sus estrofas; “Zamba de mi esperanza/ amanecida como un querer,/sueño, sueño del alma/ que a veces muere sin florecer”.

Y debe ser cierto nomás, porque esa letra, está marcando la esperanza de este grupo amante de la música argentina que después de largas décadas, decidieron volver a San Luis, unirse para volcar sobre los escenarios provinciales lo mucho que aprendieron en sus dilatadas trayectorias  desandando el mágico mundo de la música autóctona.

"Chacho" Miranda es la primera guitarra y cuenta con una rica historia musical que lo llevó a recorrer innumerables peñas y festivales. La segunda guitarra está a cargo de Juan Domingo Garro, integrante de una gran familia de músicos y cantantes sanluiseños con antecedentes de haber actuado en festivales internacionales.

El acompañamiento y el bajo es responsabilidad del ex gremialista José Pérez, que se suma a esta movida folclórica después de haber integrado varias agrupaciones.

En tanto que la finesa del canto está en la más joven del grupo, María Elisa, dueña de una voz dulce y agradable para este tipo de ritmos. Nunca estará sola, los demás integrantes del grupo oficiarán de coristas cuando la situación lo requiera.

"El grupo nació hace un par de años, nos fuimos juntando para charlar, hacer planes o proyectos relacionados con nuestra actividad. Y de pronto nos juntamos para tocar entre amigos o colaborando con quienes nos pedían  nuestro aporte", dice Pérez.

"Creemos que es una manera de devolver lo mucho que nos dieron ‑continúa‑, que son los aplausos, algo que para toda persona que se sube a un escenario es muy importante y es además el reconocimiento a nuestra trayectoria".

El ex líder de ATE admite que están "influidos por la música que llevamos muy adentro y que de alguna manera queremos aportar nuestro granito de arena a la cultura folclórica sanluiseña".

Garro señala que los tres ya pasaron los 70 años y tocan por placer. "Actuamos en peñas benéficas, cenas, cumpleaños y en varios lugares más, siempre entre amigos, sin fines de lucro y sin egoísmos, solo pedimos que nos escuchen y en eso estamos".

Los tres tienen dilatadas actuaciones en los escenarios del país, en algún momento fueron integrantes de "Los Bagualté", "Cuyum Cuatro", "Los Actuales", "Los Chilicotes", "Los Cantores del Manantial" o acompañaron a renombrados solistas y grupos nacionales en cientos de escenarios argentinos.

"Este conjunto lo integramos con Gilberto Garro de 'Cuyum Cuatro'. La idea fue armar, juntar y coincidir con un montón de cosas dentro de este marco musical. Lamentablemente Gilberto murió y fue un duro impacto emocional, no solo para la familia sino también para el grupo en formación"", señala Juan Domingo.

Después del luto musical a Gilberto lo reemplazó su sobrina María Elisa, que tiene trayectoria en el canto y es la más joven del grupo.

"Ahí nació la idea de juntarnos y unir todo lo que habíamos aprendido por separado, sumamos toda nuestra experiencia, somos de gustos muy similares y estamos a punto de debutar oficialmente el 15 de marzo", sostiene "Chacho".

Juan Domingo agrega que la música folclórica argentina es maravillosa. "Por eso nosotros sin atarnos a un ritmo específico y por pura coincidencia, sin estar juntos hicimos casi lo mismo".

"Interpretábamos música litoraleña, sureña, norteña o cuyana eso nos llevó a tener un lindo repertorio abarcando -musicalmente- a todo el país, unimos en el imaginario pentagrama musical. Somos forjadores de nuestro propio destino", agregan.

Garro cuenta una experiencia  internacional cuando en 1980, integrando "Los Actuales" junto a Rodolfo "Fito" Yubel, Rodolfo Valentín Cabrera, y Juan Carlos Soria, participaron del festival de la canción "De costa a costa" que anualmente se hacía en Piriápolis, Uruguay. "Varios grupos llegamos a estar entre los finalistas, a nosotros nos eliminó Brasil que después fue el ganador, interpretamos 'Un Himno a la Mujer'. Al final quedamos séptimos, había 32 países participando, fue algo inolvidable", considera y cuenta una anécdota de ese festival: "Quienes conducían la programación todavía no habían dicho quiénes eran los ganadores del certamen y entre las plateas se estaba vendiendo el disco de los brasileños, como 'Los ganadores', siempre tuve la duda, pero bueno, eran las reglas del juego y había que aceptarlas. Llegamos hasta ahí, que no fue poco", manifestó resignado.

Al volver a San Luis el grupo colaboró con Pablo Castro, mentor y creador del Festival Cuna de Compadres. "Si hubiéramos tenido más tiempo, ese festival apuntaba a ser mejor que el de 'La Calle Angosta", desafía Garro sin dudarlo.

Los músicos no quieren vivir de recuerdos y para ellos hacen sonar sus instrumentos como marcando un espacio en el ambiente. El ensayo está por comenzar, una cueca, un gato, una tonada, una chacarera, un bailecito, van calentando los dedos y las gargantas marcando la tarde-noche en la casa de la calle General Paz, al tiempo que  unas  palmas suenan en la lejanía.

José Pérez dice que por su actividad laboral en el Sindicato  de ATE se privaba de acompañar con más responsabilidad a sus colegas, pero no olvida a "Los Chilicotes", "Los Huayra-Hua", "Los del Quillal", "Los Bagualté", "Los Husiyeños", entre otros y menciona en un párrafo aparte para sus amigos, Hender Quiroga, el chileno Tello, José 'Pepe'  Baudry, 'Beto' Miranda, Hugo Jorge 'El Negro' Guzmán, entre otros que "llevo siempre en el corazón", expresa.

María Elisa mira y escucha a sus compañeros con mucha atención, conoce la trayectoria de todos porque su vida transcurrió entre blancas, negras corcheas y semicorcheas. Para su juventud, es una mujer preparada para transitar un camino musical. "Confío mucho en el grupo", añade.

Y sus compañeros casi a coro señalan: "Todos sufrimos ausencias en nuestras vidas, y  nosotros no somos la excepción. Sabemos lo que queremos y adónde apuntamos con nuestra música. Somos unos apasionados de lo que hacemos, creemos que estamos capacitados para hacer algo bueno. Tenemos antecedentes, y no queremos desaprovecharlo, queremos aportar a la cultura provincial nuestro trabajo musical. Solo queremos que nos escuchen".

Finalmente dicen: "Queremos sacarnos nuestra necesidad. Queremos ser oídos porque creemos en nuestro trabajo y en nuestra música. Dios nos ha dado la posibilidad de que a nuestra edad, nuestra terapia sea la música. Eso vendría a ser la esencia misma del grupo".

"El canto y la música nos ha llenado ese vacío que se produce cuando uno tiene cierta edad y mira para atrás sin renegar de su pasado", exponen mientras esperan la noche del 15 de marzo cuando se presenten oficialmente en "El Rodeo".

Estrella, tú que miraste, /tú que escuchaste mi parecer,/estrella, deja que cante,/deja que quiera como yo sé,/estrella, deja que cante,/deja que quiera como yo sé. Y como la zamba del mendocino Luis Profili, "Los Soñadores del Canto" esperan la oportunidad de que San Luis escuche sus voces y el trinar de sus guitarras para dejar su impronta en el acervo cultural sanluiseño.