El intendente de La Calera mostró su preocupación por el vecino infectado

“Por ahora no hay nada descartado. Esto nos tiene mal porque no sabemos cómo se contagió. Eso es lo que nos preocupa”, aseguró el intendente de La Calera, Fernando Sosa, en una nota realizada en “Mañana es tarde” de Lafinur FM Radio. Esto ocurrió tras el caso conocido de un leñador que se infectó con coronavirus (también dio positivo su hijo) y que llevó al gobierno provincial a decidir que esa localidad vuelva a Fase 1.

Las medidas incluyeron el cierre de la importante cementera que funciona allí. “Teníamos miedo que el virus llegara por un transportista de la cementera. Por eso no sabemos cómo llegó el virus a esta persona”, reconoció Sosa que a pesar de las medidas sanitarias y los protocolos establecidos, un ciudadano contrajo el virus. “Lo conozco pero hace rato que no tengo contacto con él. A su hijo, no”, dijo.

Sosa también contó que esta persona reparte su tiempo entre La Calera y San Luis, pero en su vivienda era donde pasaba la mayor parte de su estadía. “Tiene un pequeño campo en las afueras del pueblo, donde cortaba leña. Estamos viendo la trazabilidad para ver dónde llevaba esos productos”, sostuvo. Quieren establecer con quiénes tuvo contactos y a quiénes les vendió la madera cortada.

En la mañana de ayer (jueves), el intendente dijo que recorrió la zona aledaña al campo involucrado para hablar con los vecinos y establecer algunas certezas sobre sus movimientos. “La gente colaboró”, destacó sobre la responsabilidad social de los habitantes.

En tanto, esta mañana el Comité de Crisis comenzará con los testeos rápidos y toma de muestras. La Calera permanecerá en Fase 1 hasta el 31 de agosto.