Una plata y dos bronces para el taekwondo

El taekwondo sacó pecho. Logró una plata y dos bronces. Eva Lozza se subió al segundo escalón del podio en la categoría -63 kilogramos, mientras que Lucas Miranda (-55 kilogramos) y Walter Salguero (-63 kilogramos) fueron terceros.

Fue emocionante ver a la Selección puntana. Dejaron todo en cada combate. El sacrificio siempre da sus réditos y el premio fueron las tres preseas, que les tocó ganarlas a tres competidores, pero que son de todos.

Eva Lozza tiene 15 años y un futuro enorme. Comenzó con esta disciplina a los 11 años, con Oscar y Valeria Gómez. Más adelante conoció a Mario Cantisani, quien, junto a sus primeros maestros, es su referente. "Mi sueño es llegar a cinturón negro y poder dar clases de taekwondo de la forma que me dieron a mí, con las doctrinas que me enseñaron mis maestros", dijo Eva.

Lucas Miranda, quien se subió al tercer escalón del podio, eligió el taekwondo por un vecino que tenía un gimnasio al lado. Al principio hacía fútbol también, pero con el correr del tiempo se inclinó por esta arte marcial, que llegó a su vida para quedarse. Tiene 17 años y quiere seguir en la actividad, porque siente que es su hábitat natural. "Estos son mis segundos Juegos. En 2019 fui plata en San Juan, gané cinco de siete peleas, y ahora logré bronce en casa, así que estoy feliz", aseveró Lucas.

El otro sanluiseño que logró medalla fue Walter Salguero -17 años-. Dice que abrazó esta disciplina de chico y le sirvió para tranquilizarse y lo llevó siempre por buen camino. Es un agradecido del día que se encontró con este deporte, que el domingo le dio una enorme satisfacción cuando le regaló un podio en San Luis. "Mi sueño es competir a nivel internacional. Me esfuerzo en cada entrenamiento y no voy a parar hasta alcanzar mi sueño", sentenció Walter, quien fue medallista en su primer y último Binacional.

Los tres coinciden en que la familia fue el principal puntal para conseguir estas medallas. Son agradecidos y tres jóvenes con un futuro enorme.