No declaró el imputado por asesinar a Carlos Vallejos

Por ahora, la mejor estrategia para defenderse fue no declarar ante el juez Penal 2 de San Luis, Ariel Parrillis. Al menos así lo consideró la defensora oficial Penal 2, Nadia Agúndez, quien este miércoles, pasado el mediodía, asistió a Gustavo Ariel Oviedo, el último detenido por el homicidio del empleado municipal Carlos Vallejos, cuyo cuerpo apareció atado y con una bolsa en la cabeza el pasado 28 de febrero, en la ruta de Pescadores.

Oviedo, de 49 años, ingresó a las 12:40 al Juzgado, escoltado por policías de Homicidios y de la guardia de Tribunales. Una comisión del mencionado departamento policial lo había trasladado desde San Juan —donde fue localizado el martes 14 de diciembre— a San Luis, para ponerlo a disposición del magistrado y que tuviera su primera oportunidad de defenderse, en la indagatoria. Lo investigan por "Homicidio doblemente agravado, por ser criminis causa y por el concurso premeditado de dos o más personas". 

Unos minutos antes de ese acto procesal, la defensora Agúndez dialogó con él en la alcaidía. "Seguramente voy a entrevistarme otra vez. Además de abstenerse a declarar, solicitamos una prórroga de la detención de ocho días. Pude ver de forma general el expediente. Son varios cuerpos, por lo que tengo que hacer una lectura y un análisis detallado de la prueba que hay en el auto de instrucción y llamado a indagatoria. Recién después le solicitaré alguna medida al juez", le explicó Agúndez a El Diario al finalizar la audiencia.

Por el homicidio de Vallejos ya hay dos jóvenes procesadas con prisión preventiva: las hermanas Brisa y Valentina Oviedo, hijas del hombre que ayer no declaró.

Ambas fueron detenidas en junio pasado en San Luis. En rigor, en esa oportunidad, el magistrado ordenó el arresto de las hermanas, de su padre y de un tío de ellas, Darío Oviedo. Al finalizar la prórroga de la detención, a este último le dictó la falta de mérito y quedó libre, en tanto que las jóvenes fueron enviadas al Penal. En aquella ocasión la Policía no logró localizar a Gustavo Oviedo: se había ido de la provincia, ya que posiblemente sospechaba que estaba bajo la lupa por el crimen.