Carolina Ramírez, una puntana en la orquesta "La empoderada"

Acompañada por más de veinte compañeras músicas, Carolina Ramírez no extraña tanto San Luis desde que forma parte de “La empoderada”, la orquesta atípica de tango conformada por mujeres y disidencias que residen en Buenos Aires pero que se formó con artistas de distintos puntos del país y que se prepara para la grabación de su primer disco. Hace tres años que ejecuta el violín dentro del proyecto, un instrumento que conoció en la infancia y hoy se transformó en su fuente directa a la inspiración.

La convocatoria para llegar a “La empoderada” fue vía Facebook. Desde la página “Banco de mujeres músicas”, Carolina encontró la noticia de que se buscaba artistas para conformar tres orquestas, una de

jazz, otra de tango y una de folclore. La puntana, quien ya vivía en Buenos Aires luego de formarse académicamente en Córdoba, aceptó el desafío y realizó la audición con su talento a la espalda. Al instante quedó seleccionada y comenzó a trabajar firme junto a sus compañeras.

Dentro de la orquesta encontró una organización que la terminó de conquistar y enfocar en diferentes tareas que realiza día a día junto a sus pares. Pero principalmente, pudo desarrollar su gusto por el tango, que descubrió con el paso de los años y que combinó con su vocación frente al violín.

La música clásica fue el género que inició a Ramírez en la ejecución del violín en su infancia cuando a los 8 años empezó a estudiar en el Instituto Amadeus de la ciudad. Sus padres querían que Carolina aprendiera a tocar un instrumento, y le ofrecieron opciones hasta que dio con su compañero eterno. Fue en Córdoba, al culminar el Profesorado en Educación Musical, cuando comenzó a tomarle el gusto al violín en el tango, un estilo muy difícil de aprender pero que la puntana lo vio como un desafío alcanzable.

“Para ejecutar el violín dentro del tango hay que tener un dominio técnico del instrumento muy profesional. No solamente es seguir una partitura, sino que se debe conocer a fondo el estilo para tocarlo a la perfección y seguirle el ritmo”, explicó Carolina, quien tomó clases de este estilo junto a su maestra Valeria Martín.

Cuando se sintió preparada, luego de participar en varios proyectos cordobeses, Carolina pensó opciones para seguir su carrera musical en otros lugares del país. Al instante fijó la mirada en Buenos Aires, lugar por excelencia del tango y la milonga, donde podía desarrollar su gusto personal y transformarlo en su trabajo. “Pocos días después de viajar me encontré con la audición para entrar en 'La empoderada' y el destino ya estaba marcado”, agregó la violinista.

Además de ejecutar su instrumento, dentro de la orquesta, Carolina es la guía de cuerdas y acompaña a sus colegas para que la pieza salga más armónica. La puntana expresó que en “La empoderada” se tocan todas obras compuestas y arregladas íntegramente por mujeres y disidencias y que le dan a las músicas el lugar que muchas veces se les fue opacado dentro del tango.

“Valorizamos a las artistas y reconocemos lo que generaron en el tango, un estilo muy varonil que deja a la mujer solamente en el papel de bailarina y cantante. Con 'La empoderada' venimos a demostrar que también existen en el mundo de la música productoras, arregladoras, compositoras e instrumentistas que cuentan con el talento necesario para enfocar su lugar dentro de la escena”, expresó.