Salud va a las escuelas a vacunar contra la COVID y otras afecciones
Cada año, en marzo y abril, aumentan las inoculaciones a menores. Van a colegios públicos y privados.
El equipo sanitario avanza con la vacunación en las escuelas de toda la provincia y remarca que hay un incremento de las inoculaciones; ocurre lo mismo en los centros de salud. De acuerdo a lo que manifestó la jefa del Servicio de Inmunizaciones, María Esther Diángelo, se trata de una variable que se repite cada año en marzo y abril.
“Nosotros, que hacemos la distribución de dosis, observamos que los vacunatorios solicitan mayor cantidad de aplicaciones para los niños”, aseguró.
Según informó, desde el primer día de clases se ejecuta la campaña de inoculación escolar, que comprende ampollas contra la COVID-19 y las del calendario regular. Trabajan en escuelas públicas y privadas.
Antes del comienzo del ciclo lectivo hubo una reunión en la que autoridades de Educación y Salud trazaron el protocolo para volver a las aulas de manera segura. En esas determinaciones, la vacunación se planteó como un eje central.
Diángelo remarcó que el hecho de ofrecer el servicio en los establecimientos educativos fue muy útil. A veces, los tutores no pueden llevar a sus hijos a los centros de salud y se olvidan de revisar las libretas de vacunación, por lo que los niños reciben tiempo más tarde los fármacos correspondientes. La campaña actual permite que estén al día.
Si bien las aplicaciones se pueden disponer después del plazo indicado, advierten que hay un período que se pierde y en el que el menor queda expuesto a diversas enfermedades.
“Cuando arrancó la campaña de vacunación contra el coronavirus en niños, en octubre pasado, se hizo un gran esfuerzo y se visitó todas las escuelas; se inmunizó a los alumnos y se completaron esquemas. Hubo un gran repunte con respecto a meses anteriores cuando, por la pandemia, había menor asistencia de la comunidad a los centros de salud. Terminamos el 2021 con una cobertura más alta que en el primer trimestre”, señaló.
“La vacuna, después del agua potable, es la segunda herramienta que tenemos para evitar enfermedades como el sarampión, la meningitis, la neumonía, entre otras; con ella también se evitan muertes. Son productos que en su mayoría, a excepción de lo que refiere a COVID-19, que es más reciente, se hacen desde hace veinte o treinta años”.
“Son eficaces, seguras —agregó— y gracias a las campañas y la gran cantidad de personas inmunizadas hay patologías que prácticamente no vemos, como la poliomielitis, la rubéola o el sarampión. Aun así, existen en otros lugares del mundo, entonces está el riesgo de que vuelvan a nuestro país. Por ello necesitamos las vacunas. Más del 95% de los niños y adultos tienen que estar con esquemas completos para que esto sea una barrera en las comunidades”.
Llegaron más dosis
Diángelo destacó que ayer llegó una nueva remesa contra el coronavirus. Son 7.200 dosis del laboratorio CanSino que distribuirán a los vacunatorios para iniciar esquemas o aplicar refuerzos en mayores de 18 años. Esta vacuna se conserva en cámaras de frío de 2º a 8º, lo que permite que sean almacenadas en las mismas heladeras donde guardan el resto de las inmunizaciones.
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