Le negaron la excarcelación al sindicalista que mató a su ex

Hace un par de meses los defensores de Juan Carlos Solalinde solicitaron su excarcelación. Uno de los principales argumentos para plantear tal pedido se basó en una de las garantías procesales del nuevo Código Penal de la Provincia, que entiende que el acusado tiene derecho a transitar su procesamiento en libertad hasta una eventual condena en un juicio, siempre y cuando no exista el peligro de fuga o entorpecimiento de las averiguaciones. A dos días de cumplirse un año del femicidio de su expareja Johana Galdeano, a quien Solalinde mató a tiros, la jueza Mirta Ucelay le respondió: le negó el beneficio de la libertad. Y fundamentó su resolución en que la prisión perpetua, la única pena posible para un delito tan gravoso como el femicidio, es motivo más que suficiente para que, una vez excarcelado, quien fue secretario del gremio de la Uocra, pueda intentar escapar o perjudicar la investigación.

Marcos Juárez, junto a Ramiro Rubio, representa al exsindicalista, por su lado, explicó que ninguna de las posibilidades que planteó la magistrada pueden darse. "Nuestro cliente lejos de huir, apenas ocurrió el hecho, fue, se entregó espontáneamente en la Policía, dio el arma y reconoció haber sido el autor de los disparos. Tampoco entorpecería la investigación, porque apenas asumimos la defensa, fuimos quienes proveímos toda la prueba nueva", remarcó.

Entre esos elementos probatorios que proveyeron los últimos cinco meses hay desde pericias genéticas hasta análisis de celulares, indicó. "Están los estudios que demuestran que Johana lo agredió con un cuchillo, las conversaciones de los teléfonos, los videos y audios que prueban el acoso de ella hacia él", refirió.

De hecho, según adelantó el letrado, la defensa esperará que el celular de la víctima sea revisado en profundidad para plantear un segundo pedido de excarcelación, pero ya hacia la Cámara. Puesto que en el aparato habrían mensajes y llamados que darían cuenta "de la provocación por parte de la víctima y la concatenación con el resultado de la muerte", dijo Juárez.

"A toda la prueba fílmica, en la que ella lo agredía a él, se le suma la pericia psicológica que concluyó que Solalinde no tiene los frenos inhibitorios tan controlados, lo que indicaría que podría ser propenso a una emoción violenta frente a una agresión ilegítima", agregó.

Para Leticia Latini, la abogada que representa a la familia de Johana, el informe sobre los análisis psicológicos y psiquiátricos del acusado, en cambio, lo condenan. "Los estudios dicen que tenía grandes rasgos narcisistas, o sea que veía a las personas y a la víctima como un objeto, que tenía pleno conocimiento de sus actos al realizar los disparos, que no siente remordimiento, que volvería a cometer los mismos hechos y que busca una aprobación cuando narra lo que pasó, como para decir 'estoy justificado con lo que hice'", detalló la letrada sobre los resultados de las pericias.

MM