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Jornadas en el recuerdo: las fiestas nacionales del Turismo

La primera fue en 1965, en Potrero de los Funes. La segunda, en febrero de 1966, en Cruz de Piedra. Tuvieron repercusión en el país. Miguel Nader Ali fue el ideólogo. Un golpe de Estado impidió que se prolongara en el tiempo.

Por Johnny Díaz
| 20 de marzo de 2023
Tapa. Los diarios de la época compartieron mucha información del trabajo de San Luis en materia turística.Fotos: Martín Gómez/Archivo El Diario/Gentileza.

En la década del 60, San Luis no era ni por asomo lo que es hoy. Tenía una población estimada en unas 70 mil personas y se la consideraba una provincia "de paso".

 

Estaba gobernada por don Santiago Besso, un santafesino nacido en San Gregorio y militante del Partido Demócrata Nacional (PDN). Después fue uno de los creadores del Partido Demócrata Liberal en San Luis (PDL).

 

Santiago Besso ganó la Gobernación de 1963 con el 30% de los votos y segunda fue la Unión Popular, que sumó un 22%. Lo destituyó un golpe de Estado.

 

Pese a ser una ciudad de paso, en los años 1965 y 1966 marcó un hito en materia turística de la mano de Miguel Nader Ali, vecino de La Toma. Santiago Besso lo invitó a sumarse al gabinete para que se hiciera cargo de la Dirección Provincial de Turismo, organismo que el gobernador consideraba una veta importante ante el potencial turístico sin explotar que tenía la provincia.

 

 

Reina nacional. Cristina Barreiro fue coronada por la esposa del presidente de la Nación.

 

 

Ali, intrépido, audaz, se encargó por dos años consecutivos de organizar la Fiesta Nacional de Turismo en San Luis. El proyecto abarcaba por ese entonces la localidad de Potrero de los Funes y, un año después, Cruz de Piedra.

 

La primera de las fiestas, realizada en Potrero de los Funes, comenzó el 20 de febrero de 1965 y culminó el 28, cuando se eligió la reina provincial del turismo. Resultó electa Beatriz Acosta, de Concarán.

 

Oficialmente, la fiesta comenzó frente a la Catedral puntana, donde se había armado un palco en el que estaba el gobernador de San Luis acompañado de funcionarios del Estado y del Ejército, e invitados especiales. El coro polifónico de Mendoza, dirigido por el profesor Alfredo Dono, interpretó "Valencia". La fiesta había arrancado. Un día después, arribó a la provincia el vicepresidente de la Nación, Carlos Humberto Perette.

 

 

Caminata. Arturo Illia, presidente de la Nación, y el gobernador Santiago Besso recorren el predio.

 

 

El referente de turismo era Miguel Nader Ali y los directores, Rafael Aversa, Jesús García Torregrosa, Andrés Pagano y Julio Landi. La gerenta, Nilda Edith Sosa.

 

La fiesta consistía en espectáculos internacionales: "Luz y sonido" y "Luz y formas", con textos de Abelardo Vázquez con la participación de varios ballets; folclórico, acuático, clásico, moderno, actores, comparsas y el descenso de los cerros colindantes de antorchas portadas por soldados del GADA 141 (Grupo de Artillería de Defensa Aérea).

 

Potrero de los Funes, un lago rodeado de cerros, era el sitio ideal para la fantasía, el color y la danza, ideal para la multiplicación escalonada de distintas escenografías.

 

La dirección técnica de iluminación estuvo a cargo de Horacio Granizo Gibbs, Florencio Varas, Luis Martínez, Leopoldo Bustos, Reynaldo Vélez, Blas Antonio Ruiz y Carlos Mattiazzo. La artística general la hizo Abelardo Vázquez, acompañado de un grupo de profesionales, entre quienes estaban Antonio Ruiz, Esteban Vera, y Martín y Josefina Puebla. Manuel García, Alfredo Dono, Julia Pla, Julián del Campo, Antonio y José Ferramola, Víctor Sosa, Ramón Batallón, Jesús García, Julio Pagano, Gabino Morales, Beatriz Calabresse, María Guiñazú, Velia Elina Vílchez, Edgar Atilio Palacio, María Blanco de Dios, Rubén Díaz, Evangelina Nacif y Elsa Noemí Rosales.

 

 

Recuerdo. La señora de Ali muestra los álbumes de las fiestas del Turismo hechas en San Luis en los años 65 y 66.

 

 

A raíz del éxito obtenido en 1965, el gobierno de San Luis organizó y realizó la Segunda Fiesta Nacional del Turismo entre el 12 y el 20 de febrero de 1966, pero esta vez en Cruz de Piedra. En la dirección artística estuvo Polo Godoy Rojo y, si bien es cierto que se repitieron varios nombres, se destacaron Helena Rubinstein en maquillaje, Antonio Ruiz Méndez en escenografía general, Carlos Luis Batistelli, director de obras, y Roberto Pace, director de grabaciones estereofónicas. La fiesta se denominó "Luz y espacio dinámico". Tuvo como invitado especial al presidente Arturo Illia, quien arribó a la ciudad de San Luis acompañado de su esposa Silvia Martorelli, quien fue la encargada de coronar a la reina nacional del turismo, Cristina Barreiro.

 

Miguel Nader Ali, el artífice de las dos fiestas de carácter nacional, murió en febrero de 2000. Fue un luchador en la defensa y proyección del turismo en San Luis y el país. Ocupó por muchos años la gerencia del Consejo Federal de Turismo y recorrió el país enarbolando las banderas de la denominada "industria sin humo". Hoy, su legado está implícito en la ley que fomenta este tipo de actividades.

 

Al recordarlo, su esposa Gioconda Rebeca Carolina Pini ("Sisi") dice que su marido fue un apasionado en su trabajo como político, funcionario y visionario. "Imagínese a San Luis en el año 1963; a nadie se le hubiera ocurrido hacer una fiesta nacional de turismo. Le presentó el proyecto al gobernador Santiago Besso y comenzaron a trabajar. Todas las áreas ministeriales estaban comprometidas en la concreción del proyecto".

 

“Tenía amigos que ponían todo su empeño. García Torregrosa, de la empresa TAC; Pedro Rico, representante de la hotelería sanluiseña; Andrés Pagano, del hotel Cervantes. El doctor Alfredo Divizia era un verdadero amigo y un excelente colaborador, imposible no nombrar y mucho menos, olvidar. Rafael Aversa, de la Cámara de Comercio, las empleadas encabezadas por Nilda Edith Sosa, 'Charo' Barbosa, la esposa de Pedro Rico, la señora de Ferrando. Hacían muchísimos trabajos. No había mucha tecnología, todo era manual, casi artesanal; eso tenía doble valor”.

 

"Sisi" Ali, como se la conoce en el mundo de la pintura y la plástica, agrega: “Para la Segunda Fiesta del Turismo se eligió a Cruz de Piedra porque querían mostrar las bondades de la provincia. San Luis ha cambiado mucho, especialmente en comunicación, vías terrestres y aéreas, y la hotelería; todo es muy distinto, para nuestro bien”.

 

 

Con representantes. Carlos Humberto Perette, acompañado de candidatas.

 

 

Eran tres días y en la última noche se elegía la reina. Todos estaban comprometidos con el proyecto, todos acompañaban, nada se dejaba librado al azar. "Se trabajó con una mejor tecnología. Fue algo maravilloso, hasta se hizo una cruz que simbolizaba el nombre del dique. Los amigos y colaboradores de Miguel le hicieron un slogan muy particular: 'Si Alá no lo hace, lo hará Ali'; era muy cómico escucharlo”, recuerda la viuda.

 

“Miguel era un hombre muy simple, pero tenía un poder de convocatoria importante: comentaba una idea y todos lo apoyaban. Los ministros De la Mota y Carlos Maqueda, y el secretario general de la Gobernación Jorge Fernández eran personas que nunca le negaron la colaboración. Él decía que todo era inversión a futuro y que así la provincia se haría más conocida y crecería a nivel nacional”.

 

La programación de ambas fiestas incluyó inauguraciones, misas, pruebas deportivas, elecciones de reinas departamentales, cenas, exposiciones, carruseles, conferencias, disertaciones, paseos y bailes típicos y tradicionales donde se mostraron más de 500 artistas de la provincia.

 

“Otro emprendimiento turístico que hizo fue el Primer Safari Turístico de San Luis. Fue tan importante la convocatoria que los hoteles estaban colmados y se necesitó que los vecinos alquilaran para hospedar a la cantidad de turistas que llegaban a la provincia. Su trabajo fue incansable y fue reconocido por todos. Los diarios La Nación, Clarín y Los Andes de Mendoza se encargaron de publicitar el evento".

 

 

Final. El diario Los Andes reflejó en su portada el éxito de la Primera Fiesta Nacional de Turismo en San Luis.

 

 

Después del éxito alcanzado en San Luis, Miguel Nader Ali se reunió con funcionarios del gobierno de Mendoza y con el intendente de Cosquín, de apellido Sarmiento.

 

“La intención como funcionario del Estado era invitar a embajadores de distintos países de América y el mundo para que se conociera el potencial turístico de San Luis y el país, hacer un corredor turístico entre la Fiesta de la Vendimia de Mendoza, el Festival de Cosquín y la Fiesta del Turismo en San Luis. Lamentablemente, ese proyecto se cayó", recordó "Sisi". Y agregó: "Todo se truncó en 1966, por el golpe de Estado. Asumió Juan Carlos Onganía y se volvió a foja cero”.

 

“En San Luis asumió Matías Laborda Ibarra como interventor y allí nacieron las ferias Dos Venados. Nunca más se hizo algo relacionado con el turismo. Tuvieron mucho éxito, pero eso no era lo proyectado”.

 

Miguel Nader renunció y regresó a La Toma. Años después, en 1989, el Consejo Federal de Turismo ya estaba en funcionamiento y el emprendedor luchaba por la Ley Federal de Turismo; como invitado, asistía a las asambleas. "La política era unitaria, solo existía Buenos Aires, el interior carecía de todo", dice la mujer. “Nos fuimos a Buenos Aires por cuatro meses y estuvimos diez años. Miguel ocupó la gerencia del Consejo Federal de Turismo. No tenía muchas ganas de viajar, estaba cansado y con poca salud. El consejo necesitaba un lugar de pertenencia y lo logró para que las provincias tuvieran su lugar. Después fue ministerio y funcionó en el edificio Suipacha, en Suipacha y Santa Fe. Recorrió el país fomentando la actividad turística; de ahí en adelante fue todo un éxito”.

 

"Sisi" acota: “Recuerdo que cuando se hizo el primer congreso turístico, Entre Ríos ofreció el lugar pero después renunció. Miguel habló con Adolfo Rodríguez Saá, quien era el gobernador, y San Luis fue la sede; otro éxito para San Luis. Después se hizo en Santiago del Estero y así sucesivamente. El último fue en Mar del Plata. Fue un éxito rotundo”.

 

"En julio de 2000 se aprobó la Ley de Turismo y Antonio Torrejón, un amigo de Chubut, dijo ‘este es el legado de Ali’, que él no alcanzó a conocer por su temprano fallecimiento; una gran pena”, dice su viuda. Ahí cambió la historia del turismo nacional. Hoy, las provincias se hacen oír, reclaman y tienen éxito.

 

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