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Generosa temporada de nueces en Sol Puntano

Con un rendimiento de 2 mil kilos por hectárea, la parcela experimental confirmó que los nogales de la variedad chandler responden muy bien a las condiciones de San Luis.

Por Roberto Vinuesa
| 14 de mayo de 2023
Fotos: Héctor Portela.

Si hay cultivo que se destaca por su excelente respuesta a los suelos y al clima de San Luis, entre los ensayados en el predio de Sol Puntano, es el nogal. Y así lo demostró una vez más la parcela de una hectárea que alberga 280 ejemplares de la variedad chandler, cuya cosecha acaba de terminar con satisfactorios 2 mil kilos de nueces.

 

Todavía no despuntaba el sol y seis entrenados operarios iniciaban el último tramo de la paciente y lenta, pero redituable cosecha de nuez.

 

El lote de nogales se encuentra dentro de la superficie destinada a frutos secos, donde hay una hectárea para cada una de las especies, junto a las almendras y pistachos.

 

Los nogales están plantados a una distancia de siete metros entre líneas y cinco entre plantas, lo que significa 280 ejemplares por hectárea.

 

"Elegimos la variedad chandler porque es la que mejor performance ha tenido en cuanto a rinde y calidad de nuez en la Argentina. En variedad de nuez no hay mucha disponibilidad porque no hay grandes desarrollos de nuevas variedades", le dijo a la revista El Campo el responsable técnico de Sol Puntano, Alfredo Cartellone.

 

Para el ingeniero agrónomo, la chandler cumple con todos los requisitos, como sus condiciones de precocidad, muy buen rinde y alta calidad.

 

El lote tiene un 3% de polinizadoras de la variedad cisco.

 

La plantación se ha comportado muy bien; fue puesta en 2008 y dentro del grupo de frutos secos que se producen en Sol Puntano, es la que mejor respuesta viene dando, destacó.

 

"En almendras tuvimos también muy buenos resultados, pero con mucho daño de catas y loros barranqueros, que generaron tal problema que en los dos últimos años casi no pudimos cosechar; igual problema padeció el pistacho", reveló Cartellone.

 

Insistió que lo único que sobrevivió y que no tiene problema, lo cual no es un dato menor, al problema con el ataque de estas aves, es la nuez.

 

El técnico indicó que en la provincia hay algunos emprendimientos con nogal y reiteró que la provincia posee zonas con características ideales, como suelos profundos y permeables, principalmente que no tengan acumulación de humedad, porque allí prospera un hongo de madera que ataca las raíces, llamado fitósfora y que es uno de los principales problemas sanitarios que tienen estas plantas.

 

En suelos con bajo drenaje, mucha acumulación de agua, pesados, de tendencia arcillosa, puede tener problemas.

 

En Sol Puntano vienen con un rinde estabilizado en los últimos años de 2 mil kilos por hectárea, aún lejos de su potencial calculado para San Luis, estimado en casi 4 mil kilos.

 

La existencia de algunas plantas chicas, secas, o fallas en las hileras hacen bajar el promedio de rendimiento, aclaró.

 

La chacra experimental del Ministerio de Producción le da mucha utilidad a este fruto seco, ya que lo vende exitosamente como nuez entera, pelada como mariposa o como parte de un mix con pasas de uva y almendras.

 

El nogal tiene un período juvenil un poco lento, que se prolonga por tres a cuatro años, explicó: "Al quinto año ya tuvimos una producción interesante; ya en el séptimo u octavo año está su producción a full".

 

A la hora de las recomendaciones para los interesados en invertir, Cartellone destaca que el nogal es un cultivo "muy interesante para San Luis porque no tiene daños de loros ni catas, que es un gran problema en toda la región de Cuyo y en especial en Mendoza, donde las aves hacen estragos en almendros y cerezos, por ejemplo".

 

También valora como ventaja de esta variedad que tiene un ciclo bastante tardío, porque se empieza a desarrollar desde octubre, lo que la convierte en una especie que se adapta muy bien a los fríos invernales: "Rara vez se puede observar una merma en su producción por heladas primaverales, a diferencia del almendro que arranca un mes y medio antes".

 

La cosecha es muy sencilla. La hacen manual y en dos o tres pasadas. Comienza a fines de marzo y durante todo abril.

 

Actualmente los proyectos para nuevas plantaciones comerciales de nogales están pensados en la mecanización de la cosecha por falta de mano de obra.

Se levanta lo que está en el piso y con varilla golpean suavemente las ramas que contienen nueces.

 

“Para evitar que la fruta quede mucho tiempo tirada en el suelo y exista la posibilidad de que adquiera un sabor rancio o perder calidad, debido a que puede entrar en contacto con la humedad, apenas arranca esta etapa decidimos levantarla o sacarla de la planta”, dijo Cartellone.

 

En grandes superficies cultivadas, donde la producción es a mayor escala, se trabaja con cosechadoras o vibradoras, lo que hace que sea más homogénea la cosecha y se lleva a hornos, para que las nueces cobren mayor uniformidad y pierdan humedad. La fruta posee un contenido oleico muy importante.

 

La mecanización sirve para cubrir la falta de disponibilidad de mano de obra, explicó, un aspecto que hoy contemplan los nuevos proyectos para nuevas plantaciones de nogales.

 

La cosecha consta primero de la recolección en forma manual en cajas. Luego son llevadas a un secadero para quitarles la humedad que adquieren en el campo, cuando el fruto llega al nivel mínimo necesario, se lo lleva al sector de partición y selección.

 

En esa etapa, son separadas entre las que cumplen con la condición de calidad y las que no. Las que disponen de esa categoría son utilizadas para el mix de frutos secos, de alto valor nutritivo que luego serán comercializados.

 

La mayor extensión productiva de nogales de la provincia de San Luis se encuentra en Cortaderas. Frutos del Conlara SA es una empresa de Carlos Chávez Asensio que concretó la plantación en 44 hectáreas hace más de diez años.

 

El campo tiene plantada la variedad chandler de nuez, con polinizador cisco y franquette.

 

Allí, unos 12 mil árboles están perfectamente alineados en franjas separadas cada siete metros, mientras que entre una y otra planta hay cinco metros.

 

En Argentina, el consumo de nuez es de 9.000 toneladas anuales, lo que representa un consumo per cápita de 220 gramos por habitante. La demanda aumenta en el período navideño.

 

En nuestro país, la producción alcanza aproximadamente las 10.000 toneladas de nuez con cáscara, y las principales provincias productoras son Catamarca (47%), La Rioja (24%), Mendoza (14%), San Juan (8%) y Río Negro (7%).

 

Pero también, los especialistas consideran importante el incremento de nuevas plantaciones en otras regiones localizadas en las provincias de Río Negro, San Juan, Salta, Córdoba y San Luis.

 

La nuez chandler es grande y lisa; tiene forma ovalada y una cáscara bien sellada. Las nueces chandler son conocidas en el mundo entero y son muy apreciadas por los compradores por sus frutos de color muy claro y de gran calidad.

 

Elegimos la variedad chandler porque es la que mejor rinde y calidad proporciona en la Argentina (Alfredo Cartellone- ingeniero agrónomo-responsable técnico de Sol Puntano)

El nogal chandler es un árbol de vigor medio y porte semiabierto. Responde muy bien a tipos de formación superintensivo 7×6, aunque también se obtiene muy buena producción de nueces en tipos de formación intensivo 8×8.

 

La variedad fue criada en California y lleva el nombre del científico de frutas William Chandler. La nuez es muy utilizada por su alto rendimiento. Comienza a dar frutos en el cuarto año después de la siembra. Se distingue por su gran tamaño de fruto con una cáscara fina, que se divide fácilmente en 2 partes.

 

Chandler alcanza una altura de 7 metros. Peso medio de la fruta: 17 gramos. Un jardinero puede cosechar alrededor de 35 kilogramos de nueces de un árbol joven y 70-90 kilogramos de un árbol más viejo. Chandler pertenece a las variedades laterales, es decir, los frutos se forman no solo en la parte superior de los brotes adultos, sino también en las ramas jóvenes.

 

Las ventajas de esta nuez incluyen cualidades como que comienza a dar frutos temprano; alto rendimiento; el núcleo se quita fácilmente de la cáscara; resistencia a la sequía; buena calidad de conservación y transportabilidad, y tiene alta inmunidad.

 

Dentro de los aspectos más importantes que determinan el valor comercial son el tamaño de las nueces (calibre), el color de la pulpa o mariposa extra light y la sanidad e integridad de la semilla (libre de insectos, hongos y daños físicos).

 

Si bien todo ello requiere de adecuadas labores culturales, dependen en gran medida del manejo de la nuez en la recolección y en el periodo de almacenamiento (cosecha y poscosecha).

 

Por lo tanto, la cosecha de las nueces debe realizarse de la forma más rápida posible y en el momento más oportuno. Esta actividad debe hacerse de manera adecuada y cuando la maduración sea lo más homogénea posible, recordó Cartellone.

 

Terminada la cosecha comienza la etapa de la poda. Los objetivos de la poda del nogal son controlar el tamaño de los árboles, mantener el vigor y la producción en ramos fructíferos, sustituir las ramas viejas menos productivas por otras de renuevo y eliminar las ramas agotadas, secas o mal situadas con el fin de que la luz llegue a todas las partes del árbol. La mejor época de poda es el periodo que transcurre desde la recolección de la nuez hasta la caída de las hojas.

 

En general, la actuación de la poda en el nogal, no tiene la finalidad de obtener frutos de mayor calibre, sino el propósito de lograr producciones de mayor volumen total y el mantenimiento de estas en el tiempo, recordó el técnico.

 

Las podas de formación se realizan en vaso, ya que proporcionan copas de mayor rendimiento y menor altura, permitiendo una mejor aireación de la masa vegetal y un árbol más manejable en cuanto a la realización de la poda, tratamiento y recolección.

 

El número de ramas principales puede oscilar entre 5-10, distribuidas a lo largo de un tronco cuya longitud puede variar de 1.50-3 m.

 

Para iniciar la formación del árbol suele despuntarse este a una altura de 1.50 m, de modo que provoque la ramificación lateral, una de cuyas ramas continuará hacia arriba el eje central.

 

El objetivo de la poda de fructificación es rebajar las guías para que los árboles no se alarguen excesivamente, aclarar los centros, eliminando aquellas ramas mal situadas y entrecruzadas que impiden una correcta aireación e iluminación de la copa del árbol, con el objeto de desarrollar una mayor fructificación en esa región. En variedades con abundante producción en ramas laterales habrá que eliminar algunas de ellas ya que a medida que la planta envejece, tiende a fructificar solamente en la periferia, quedando el centro de la copa más o menos sombreado.

 

Hay que prestar una atención muy especial a la desinfección y sellado de heridas, las cuales tienden a cerrar con gran dificultad.

 

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