Estefanía Banini: un adiós con dejo de hasta siempre

Por Sofía Jaimez Bertazzo

Llegó el momento que nadie quería presenciar: las lágrimas y el adiós de una de las grandes referentes del fútbol argentino. Si bien Estefanía Banini no se va a separar de la Selección ni de su carrera, sí aventuró que no va a estar en la próxima cita mundialista dentro de cuatro años.

Las gambetas de una distinta esquivan la última pelota y recorren hasta el infinito en los recuerdos de toda una generación. “Me toca irme, pero estoy orgullosa del camino recorrido. Y sí, es una decisión tomada”, confirmó.

Cada una de sus compañeras, el técnico y todos los profesionales que fueron parte del proceso dedicaron unas palabras a la número 22. Oraciones que nunca serán suficientes para explicar lo que significa su figura para el equipo y para la gente.

Fue una de las noches más emocionantes para la pequeña gigante; estar ahí ya era un sueño cumplido y el balance es muy positivo porque cada vez que alzó la voz en búsqueda de igualdad de oportunidades se fueron concretando.

Finalmente, un Mundial con 32 equipos equiparando la organización, infraestructura y el talento humano destinado a que el torneo tenga el reconocimiento que merece, y ella fue parte. Muchas cámaras y periodistas mostraron las actuaciones de las futbolistas para que cada vez sean más las que se vean reflejadas allí. Un dato que también remarcó Marta, la histórica jugadora de Brasil.

Con los ojos brillosos y el llanto contenido, Banini comentó en la zona mixta tras el último partido contra Suecia: “Los resultados no reflejan el crecimiento que estamos teniendo. Estoy feliz por toda la gente que nos ha apoyado y por el progreso a nivel mental y cultural que estamos teniendo”.

El mejor cierre de actuación fue en el Waikato Stadium: una a una se fueron acercando al arco de la popular donde la banda argentina estaba concentrada; de allí provenía el calor y la buena energía. Estefanía dio el paso inicial para que todas formen fila y entrelacen los brazos: en los momentos duros siempre hay amor y gratitud. “La nueva generación tiene que disfrutar de las oportunidades y esta gente, es algo que no pasaba, y sé que cada vez van a ser más”. afirmó.

El director técnico Germán Portanova recalcó que la mendocina es mucho más que fútbol y que hay cosas que no se ven desde afuera. Su trayectoria es magnífica y refleja su persona. “El legado es increíble, nunca perdieron la identidad, las ganas de querer ser y de preservar lo logrado”, recalcó.

La vida te da y te quita dice la frase. Para Banini fue así. “Estoy orgullosa de haber sido parte de esa generación que abrió el camino, pero también me hubiese gustado tener estas oportunidades”, aseguró.

Por eso siempre alienta a las más chicas a intentar y a no callar. Le preguntamos: ¿qué cree Banini que le deja a esta nueva generación? Y respondió: “Espero haber dejado el ser profesional, el no rendirse y el luchar por las convicciones, por los sueños y los valores que uno tiene, en busca de un objetivo”.

Recalcó que confía en la generación que viene y que solo espera que disfruten. Y claro, no se olvidó de agradecer a su gente, la de Mendoza y toda la que estuvo presente en el estadio, a las que la acompañaron en su vida y en su carrera, amigos y familia.

Además, comentó que para la próxima Copa del Mundo espera estar cerca. “Creo que se va a representar siempre bien al país. Hay que aprovechar las fechas FIFA y estar listas para dar lo mejor”.

Si bien aún hay una brecha con respecto a las potencias, cada vez es más pequeña y eso quedó demostrado en el rendimiento, pues salieron a jugar de igual a igual con todos los equipos. A veces se gana, otras se pierde, pero siempre se hace historia. ¡Gracias Banini!

Redacción / NTV