Nigra atraída por el imán de Paul McCartney

El fanatismo por Paul McCartney pudo más y venció la tentación de la ministra de Salud Teresa Nigra que, contra viento y marea, se dio el gusto de verlo en vivo y de bailar sobre el césped del estadio mundialista “Mario Alberto Kempes”, de Córdoba.

La funcionaria, junto a integrantes de su familia en Villa Mercedes, no se privó del histórico recital del ex The Beatles y pagaron entradas que en promedio ascendieron a 200 mil pesos.

Como siempre suele suceder en estos tiempos, la contadora tuvo la mala fortuna que alguien la reconoció y no dudó en captarla con su celu justo cuando se deleitaba con uno de los temas de Paul y bailaba meneando la cabeza.

Ese momento, al viralizarse voló por las redes y ocasionó un temporal de comentarios.

Algunos salieron en su defensa y otros le saltaron a la yugular, por todos los reclamos salariales y otras carencias en el sector de la salud.

Precisamente, horas antes de emprender el viaje, la ministra había estado reunida con la dirigencia del gremio APTS y una de las respuestas que remarcó es la muletilla que caracteriza al poggismo: “no hay plata”. “Sin embargo, para otras cosas sí hay y ni que hablar para nombrar funcionarios y comprar voluntades”, remarcaron en uno de los comentarios en las redes.

Lo cierto es que esa reunión no pudo evitar el paro por 24 horas en el servicio de pediatría del Hospital de Villa Mercedes en reclamo de mejoras salariales y que, además, sufriendo la falta de médicos.

Pese a esta situación que se cumplió, a reclamos que otro gremio (ATSA) está haciendo por las ambulancias, a las permanentes quejas por la demora en la entrega de medicamentos y otras cuestiones sanitarias más que preocupan, Nigra acompañada por familiares y amigos, cumplió su sueño y bailó con su ídolo, con Paul McCartney.