Un Tribunal encarceló a un acusado de violar a su hijastra que otro juez había liberado

Un Tribunal de Impugnación hizo lugar a un planteo de la Fiscalía y del abogado de la denunciante y le dictó cuatro meses de prisión preventiva a P.N. El hombre había sido imputado semanas atrás por violar, al menos durante cuatro años, a la hija adolescente de su expareja. No obstante el juez de Garantías de Villa Mercedes, Matías Farinazzo Tempestini, había resuelto que, como no suponía un peligro para la víctima ni para el curso de la investigación, podría sobrellevar tal imputación en libertad.

El Tribunal, conformado por los jueces Hernán Herrera, Marcelo Bustamante Marone y Jorge Sabaini Zapata, consideró que si el hombre de 35 años continuaba libre hasta la realización del juicio existen riesgos procesales de que entorpezca las averiguaciones, poniendo en riesgo a la víctima y/o testigos o hasta que se dé a la fuga.

Germán Anabitarte, el abogado de la denunciante y madre de la joven damnificada, había explicado que, teniendo en cuenta el delito gravoso que le imputan, es plausible pensar que, llegado el momento, P.N. ni siquiera se presente al juicio en su contra. Está acusado de "Abuso sexual doblemente calificado por ser el encargado de la guarda y por la condición preexistente de convicencia con un menor de 18 años", un delito que, en caso de condena, supone una pena que va desde los ocho a los 20 años de cárcel.

Los familiares del acusado, por su lado, sostienen que el hombre jamás abusó de la chica y es "víctima de una falsa denuncia" hecha por su expareja y madre de la damnificada.

P.N. fue detenido el 19 de noviembre en un domicilio de Libertad al 1100. Luego de ocho días de encierro en una comisaría, el juez de Garantías decidió admitir los cargos por los abusos sexuales que le formuló la Fiscalía, pero rechazó el pedido de cuatro meses de prisión preventiva.

El hombre fue denunciado en julio pasado cuando la víctima, que hoy tiene 16 años, se animó a contar lo que le hizo los años que vivieron bajo el mismo techo, señaló Anabitarte. La joven no pudo referir con certeza cuándo empezaron los ultrajes, pero dijo que pudo ser cuando tenía 12 años o, incluso, antes.