Las mujeres que usaron tarjetas de crédito y débito ajenas acordaron pagarle a la víctima

Las mujeres que, hace unos días, fueron imputadas por haber hecho compras de un millón de pesos con unas tarjetas de crédito y débito que hallaron a nombre de otra mujer están a un paso de solucionar sus problemas con la Justicia. Se comprometieron en entregarle a la víctima una suma fija de dinero, en cuotas y, una vez completado el pago, el fiscal José Olguín retiraría los cargos en su contra.

Las mujeres están imputadas por "Defraudación mediante el uso de tarjetas de crédito y débito hurtadas". Y, desde el sábado hasta el martes, el tiempo que duró la prórroga que habían solicitado sus abogados, estuvieron con prisión domiciliaria.

El martes, cuando venció la prórroga de la detención, en una nueva audiencia realizada ante el juez Santiago Ortiz, las mujeres propusieron el acuerdo de reparación integral para la dueña de los plásticos, que luego fue aceptada.

El juez de Garantías dispuso, además, una prohibición de acercamiento personal y por redes sociales respecto a la damnificada y deberán presentarse del 1° al 10 de cada mes, durante tres meses, a firmar un libro en Fiscalía, para dejar constancia de que están sometidas al proceso.

La víctima perdió sus tarjetas la semana pasada en una escuela de Villa Mercedes, cuando fue a llevar a un chico. Las imputadas, una de las cuales es madre de un chico que va a ese colegio, encontraron los plásticos y, sin pensarlo, hicieron compras en distintos comercios de la ciudad.

La damnificada se dio cuenta de lo que había perdido cuando llegó a su casa y revisó su tarjetero. Después ingresó a la aplicación móvil donde tenía registrada los plásticos. Fue cuando notó que faltaba dinero de su tarjeta de débito y la habían usado para hacer unos 15 pagos por distintos montos.