La crisis económica impacta de lleno en la Semana del Estudiante

No queda casi nada para que comience la Semana del Estudiante, y si bien hay varias localidades de la provincia donde se festeja, históricamente El Trapiche es el destino por excelencia. Todos los años, miles de estudiantes de distintos puntos se trasladan a esta bella localidad  del Departamento Pringles para celebrar durante varios días. Sin embargo, los festejos en este 2024 parece que serán distintos o, por lo menos, menos multitudinarios que sus predecesores.

El Diario de la República estuvo en la localidad para hablar con los vecinos, con los cabañeros y con la Municipalidad, para saber cómo era el movimiento en la previa a este gran evento.

“Todos somos conscientes de la crisis económica que estamos pasando, no solo como provincia sino como país. Hemos notado una baja en cuanto a los hospedajes y alquileres. Tenemos más contacto con los cabañeros y podemos confirmar que a día de hoy están en un 60% de ocupación”, expresó Francisco Lucero, secretario de Gobierno municipal, quien puede dar una mirada integral sobre la situación de todas las cabañas dentro del ejido.

Los cabañeros consultados por este medio, coincidieron en el panorama: unas pocas consultas (o ninguna en algunos casos), y cero alquileres. Una situación lamentable, porque la Semana del Estudiante supone una oportunidad única fuera de la temporada alta, no solo para quienes alquilan, sino que también para todo el pueblo que motoriza su economía durante varios días.

“Nosotros no hemos alquilado. La idea era hacerlo pero como no tuvimos ninguna llamada, decidimos no alquilar. Vemos todo muy tranquilo este año, no se ve mucho movimiento de chicos preguntando por alquileres. Años anteriores era otra cosa, había muchas consultas, muchas llamadas preguntando por precios. Creo que la crisis económica, que se profundizó mucho este año, es una de las causas”, indicó Diego Barroso, encargado de las Cabañas San Antonio.

Marcelo Suárez, de GB Apart, comentó: “Tengo unos apart hotel, no suelo alquilar para estudiantes, pero como estoy en la entrada siempre me consultan. Este año me han consultado pocos y por lo que sé de los colegas, está bastante difícil la situación. Nada que ver con años anteriores. No hay plata. El principal factor es la dificultad económica de la gente. El otro día alquilé uno para dos chicas que preferían venir un día menos porque no les alcanzaba la plata, así que al final les hice precio para que puedan hospedarse por los días que querían, porque no me servía ni a mí ni a ellas”.

 Cristian, de Cabañas Odinson, coincidió: “El año pasado se alquilaron todas las cabañas, fue bueno el Día del Estudiante, pero este año no. No tengo una sola cabaña alquilada. Hubo muchas consultas a comienzos de año, pero a todos los cabañeros nos pasó lo mismo, de no saber qué precio poner porque no sabíamos cómo iba a ir la economía. Ese fue un gran problema. En marzo o abril ya teníamos todo alquilado en años anteriores, pero era más fácil predecir un número para no quedar tan atrasados en septiembre. Están empezando a consultar más estos últimos días, pero creo que la economía es la principal causa de esta situación. Está todo muy caro y uno prioriza las necesidades básicas”.

Tanto los precios como los tipos de comodidades que se ofrecen en los hospedajes, son muy variables, pero en líneas generales el precio va entre 25 mil y 50 mil pesos por día y por persona. Ante este panorama, y con los bolsillos maltratados de los puntanos, desde la Municipalidad piensan que puede surgir una variable: “Creemos que puede pasar que vengan muchos chicos por el día. Desde la Secretaría de Transporte nos afirmaron que pondrán refuerzos de colectivos que arrancarán a medida que se llenen. Eso puede alentar a que se dé esta situación”, opinó el funcionario municipal.

¿Un cambio profundo?
Las serias dificultades económicas están atacando fuertemente al sector de los cabañeros, que si no alquilan, se les hace muy cuesta arriba seguir adelante. En ese sentido, comienzan a evaluar cambios en la modalidad de trabajo.

“Los cabañeros pagamos muchas cosas y no tenemos cómo recuperarnos. Desde febrero, exceptuando algún fin de semana largo, esto estuvo totalmente paralizado. El costo de la luz y el gas siguieron escalando. Entonces muchos cabañeros están analizando el alquiler de forma permanente, porque así te asegurás un ingreso todos los meses”, afirmó Cristian de “Odinson”. 

De darse esto, puede ser un cambio absoluto en la oferta de hospedajes de una localidad que hoy está prácticamente abocada en su totalidad al turismo.