Un accidente que pudo haber sido una tragedia
Un hombre fue aplastado por una camioneta cuando limpiaba un camino que está intransitable, producto del olvido de los organismos del Estado provincial.
Una verdadera odisea fue protagonizada por vecinos del paraje El Lechuzo y el personal del centro de salud de Balde, en un operativo de emergencia que tuvieron que desplegar para auxiliar a otro vecino que sufrió gravísimas lesiones al ser aplastado por su camioneta cuando limpiaba un camino lleno de arena y malezas.
Reyes Quiroga, de 72 años, salió el martes a la tarde a mejorar las condiciones para el tránsito en la ruta provincial que une El Lechuzo con Las Salinas. Cuando se encontraba en una zona de barrancas y muchísima arena, cerca de su casa, su vieja camioneta Dodge se desestabilizó con tan mala suerte que le aplastó prácticamente medio cuerpo.
“A los gritos pidió ayuda, uno de mis hermanos lo escuchó y fueron a socorrerlo y apenas los vio, se desmayó. Eran alrededor de las 18:00”, recordó su hermana, Reina Reyes.
Inmediatamente pidieron ayuda y fue enviada una ambulancia de Balde. Pero como el camino que nace en la Autopista de la Serranías Puntanas está en pésimas condiciones, la ambulancia se quedó pegada en un enorme guadal, lo que obligó a pedir ayuda con vehículos apropiados para transitar por este tipo de terrenos.
Fue así que después de una larga espera (cada minuto ante este tipo de situaciones parece una eternidad), mediante una camioneta 4x4 de la Intendencia de Balde, el personal del centro de salud de Balde pudo llegar hasta la casa de los Reyes y auxiliar al jornalero mal herido. Eran cerca de la 24:00, del martes.
Tras las primeras curaciones y la colocación de calmantes, en ese vehículo lograron llevarlo hasta el cruce con la autopista, desde donde en otra ambulancia, lo trasladaron al Hospital Central “Ramón Carrillo”, donde tras ser asistido en urgencia fue alojado en terapia intensiva.
Actualmente, fue derivado a una sala común donde se repone de las delicadas lesiones que tiene fundamentalmente en la cadera.
Reclamos sin respuesta positiva
Reina Reyes hace pocas semanas estuvo en diferentes organismos del estado provincial reclamando por la intransitabilidad de los caminos de tierra y arena en la zona de Balde y Las Salinas del Bebedero.
Entre otros inconvenientes, marcó que no podían salían a comprar alimentos y que uno de sus vecinos tuvo que caminar cerca de 20 kilómetros para no perder un turno médico en un hospital.
Este viernes, mientras cuidaba a su hermano, recordaba al subdirector de Vialidad, de apellido García, que ante su reclamo le dijo que no sabía del paraje El Lechuzo. También, se mostró algo molesta con la Intendencia de Balde porque no se ocupa de gestionar que vengan a arreglar los caminos o, si le corresponde, de su mantenimiento.
Reyes Quiroga precisamente sufrió el gravísimo accidente cuando hacía tareas que no le correspondían. “Salió a desmontar un poco las orillas del camino para que los vehículos puedan avanzar y no se rayen”, comentó su hermana que está muy preocupada por las secuelas que le pueden quedar de este accidente, que pudo haber terminado en una tragedia.


Más Noticias