Cuando llegó al Juzgado Penal Nº 2, Miguel Ángel Escudero tenía claro que no iba a pronunciar una palabra. “El Tyson”, como lo conoce la mayoría del barrio José Hernández, está acusado por el homicidio de Cristian “El Tita” Ponce. Ayer a la mañana, en lugar de explicar qué sucedió el día del crimen, se abstuvo de declarar ante el juez Jorge Sabaini Zapata, que lleva adelante la causa.
Tenía puestas unas zapatillas deportivas, jean y remera de mangas cortas, porque el sol del martes se hizo sentir desde temprano. Fuertemente custodiado, caminó el trayecto desde el móvil policial que lo trasladó al edificio judicial hasta la oficina de Sabaini Zapata.
“La indagatoria fue a las 9 de la mañana, y el acusado se abstuvo de declarar”, confirmó el secretario del Juzgado, Ariel Parrillis. “Le comunicamos formalmente la imputación del delito por el cual se encuentra detenido, que es homicidio simple con uso de arma blanca”, especificó.
“Hizo uso de su derecho a no hablar y en el mismo acto nombró como su defensor a Guillermo Levingston, que pidió una prórroga de la detención por ocho días para reunir pruebas a favor de su defendido”, agregó. Concluido ese plazo, Sabaini Zapata tendrá 48 horas para decidir si procesa a Escudero o no.
Habrá que esperar un tiempo más, tal vez hasta el juicio, para escuchar la versión de “El Tyson” sobre lo que ocurrió el día del asesinato. Mientras, deberá esperar la decisión del juez en la celda de la comisaría que ocupa desde el domingo.
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