Mucha gente, algo de frío y la sensación de continuidad

La reconocida resaca del carnaval era evidente ayer en el Ministerio de Turismo y las Culturas. La mayoría de sus empleados y hasta la ministro Celeste Sosa estaban aquejados de estados gripales de diferentes niveles luego de tres largas noches en Potrero de los Funes.
Pero el halo que rodeaba las oficinas donde se gestaron los hechos era de satisfacción. "Fue una fiesta fantástica, con mucha gente  que respondió a nuestros esfuerzos de los últimos nueve meses", dijo la titular de la cartera en diálogo con ETC.
Para Sosa, de los 60 mil espectadores que tuvo el carnaval en las tres noches, casi la mitad fueron turistas. "Si bien es difícil establecer un porcentaje, algunos indicios, como los lugares donde se compraron las entradas y la ocupación hotelera, nos marcan esa tendencia. Además, históricamente ha sido así", reconoció.
La convocatoria fue la respuesta a la intensa campaña promocional que hizo la organización, con visitas a 22 ciudades de todo el país e incluso a Chile, donde la comitiva puntana pasó una semana el año pasado.
También la funcionaria destacó el trabajo de  los 2.500 puntanos que participaron en la logística del show. Y reconoció que hay algunas cosas que mejorar.
"Todos los años, el carnaval se va perfeccionando en distintos aspectos -señaló-. Nuestra intención es seguir en ese camino". El objetivo central para la sexta edición será seguir sumando espectadores.
Sosa explicó algunos claros que se vieron en las tribunas durante las jornadas. "Había plateas que estaban destinadas a los pasistas, así que no estaban llenas simplemente porque iban a ser ocupadas una vez que terminara la actuación", dijo la ministro, quien también adjudicó al frío del viernes uno de los motivos por los que la gente llegó más tarde.
"No es menor que todas las noches hayan terminado en paz, sin ningún incidente", agregó la titular de la cartera que tuvo a su cargo la organización. Acaso las únicas discusiones hayan tenido lugar en el complicado diseño de estacionamiento que estableció la Policía y en algunas reventas de tickets que se notaron, sobre todo en los sectores más costosos.
Por el resto, la ministro espera que sus funcionarios terminen de entrecruzar datos con hoteleros, funcionarios municipales y encargados comerciales para determinar el movimiento de dinero que hubo en la provincia durante el fin de semana largo. Los números que tiene sobre el sector hotelero son muy beneficiosos.