Con una delantera imparable, San Martín, de Merlo, goleó 4 a 0 a Atlético Concarán y se quedó con la zona n° 44. De esta manera, "El Santo", Deportivo Casino y "El Celeste" -como mejor tercero- clasificaron a la siguiente ronda.
El equipo adelantó que en los próximos días viajará a San Luis para practicar en una cancha de césped.
El último encuentro del grupo de El Valle de Conlara ponía en juego algo más que tres puntos. Porque en caso de empate, San Martín quedaba fuera de los cruces con el resto de la Provincia, más allá de la buena campaña de los dirigidos por Amaya y Bongiovanni.
Por ello, el local salió con todo a disputar un primer tiempo trabado en la mitad de cancha y con más garra que fútbol.
Sin embargo, Matías Agüero (11), el jugador más regular y desequilibrante de la zona, volvió a convertirse en figura.
Tras varios desbordes por la izquierda y combinaciones con Marcos Gaitán (10), El Rojo consiguió a los 35 minutos un tiro libre pegado al área grande, ideal para Lucas Amaya (7): el volante le pegó a colocar y luego del rebote en la barrera corrigió con un remate que terminó en la red; 1 a 0 y delirio en el banco y en las tribunas.
Más allá de algunas contras y pelotazos de media distancia de Sebastián Camargo (9) y Eduardo Becerra (10), el local supo cerrarse bien atrás bajo las coordenadas del experimentado Aldo Paredes (5), para así salir rápido por el costado izquierdo.
Y al cierre de la primera mitad, Agüero volvió a tocar con Gaitán para quedar solo frente al arquero Rodolfo Díaz y ampliar la diferencia con un "latigazo" cruzado: 2 a 0 y a descansar.
Con el resultado bajo el brazo, El Rojo salió a disputar los segundos cuarenta y cinco con mayor tranquilidad y pausa.
Hasta que a los cinco minutos, el defensor de Atlético, Pablo Camargo (4), sin pelota, le pegó un codazo a Gonzalo Becerra (9), que fue advertido y finalmente cobrado por el árbitro, Rubén Figueroa. Expulsión, penal y gol del propio Becerra.
Durante los últimos veinte, San Martín la puso bajo la suela y tocó lejos de su arco.
Y en medio de los cambios de Paredes y Becerra, a cinco minutos del final, le bajó del cielo un rebote a Gaitán, quien la acomodó para su perfil zurdo y le pegó con efecto -al mejor estilo Messi- al palo más lejano de Díaz, para así sentenciar la goleada y empezar a pensar en El Trapiche.
“Cumplimos este primer objetivo, y vamos a ir por todo, porque estamos jugando muy bien. La base la tenemos y seguiremos entrenando para pelear hasta el final”, contó eufórico el director técnico de San Martín, Ivar Amaya, quien a su vez adelantó que en los próximos días viajarán a San Luis para practicar en una cancha de césped.
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