La pista de Seguridad Vial vuelve a salir a las escuelas

Escuela nueva en barrio nuevo. El lanzamiento de este año del Plan “La Seguridad Vial no es un juego” será mañana a las 8:30 en la escuela multilingüe “Progreso y Sueños” del 500 Viviendas, en el extremo norte de la ciudad de San Luis.

"Los chicos absorben la información rápidamente. Al aprendizaje lo toman como un juego, porque simulan que es real”

En los próximos días, la actividad tendrá definido su cronograma con la intención de pasar por todos los establecimientos educativos para que los alumnos del primario y secundario puedan aprender las principales señales de tránsito.

“Los chicos son los conductores del futuro. Si logramos llegar a ellos de un modo amigable, donde al mismo tiempo les mostremos la dureza de lo que significa no respetar las leyes de tránsito y de seguridad vial, estamos bien encaminados para los años que siguen”, comentó el jefe del Programa Seguridad Vial, Ramiro González Belzunce.

El funcionario manifestó que para este año, el objetivo está centrado en poder llegar a más escuelas e implementar nuevos juegos que les permitan a los chicos instruirse de modo didáctico y lúdico para aprender cómo debe comportarse un conductor.

Aunque no quiso adelantar qué juego se sumará este año, dijo que ya tienen listo un esparcimiento al que consideraron “entretenido” y con el que buscarán renovar la serie de actividades para los pequeños.

La iniciativa comenzó a finales de 2012 y ya visitó 115 escuelas en toda la provincia. Esto supone la capacitación de más de veinte mil chicos de diferentes edades, desde el nivel inicial hasta el secundario. Aunque en el verano se sumó la instrucción en distintas colonias de vacaciones de la provincia: Santa Rosa del Conlara, Los Molles, San Francisco, Quines, El Trapiche, Merlo, Potrero de los Funes, Juana Koslay y San Luis. “Los turistas mayores se acercaban para ver de qué se trataba esto y de paso nos felicitaban por la iniciativa”, agregó González Belzunce.

El plan se concretó hace dos años con la idea de adquirir juegos temáticos de grandes dimensiones, alusivos a pistas viales con los respectivos elementos señalizadores y un simulador de manejo.

“Con el paso del tiempo y debido al interés mostrado tanto por alumnos y docentes se compraron tres pistas educativas viales de diferentes tamaños, cuatro simuladores de manejo y un inflable temático”, adujo el jefe del Programa Seguridad Vial.

En un principio, el proyecto se desarrollaba en los establecimientos educativos pero durante el receso escolar se lo llevó a colonias de vacaciones, balnearios y camping de distintos puntos de la provincia. A esto se le sumaron, durante el año 2013, actividades en barrios de la ciudad de San Luis.

Proyecciones

Los alumnos recorren la pista educativa vial. Ésta, emula una pequeña ciudad donde los estudiantes transitan por ella en karting  y cuatriciclos a pedal donde simulan una conducción real. Allí se encuentran rotondas, semáforos, espacio de estacionamiento, señales de prohibición, señales preventivas e informativas, mientras el personal del cuerpo de Seguridad Vial es el encargado de guiar e instruirlos.

“Los chicos absorben la información rápidamente. Al aprendizaje lo toman como un juego, porque simulan que es real pero a la vez aprenden a utilizar el casco, ponerse el cinturón de seguridad, deben respetar los semáforos ya que deben detenerse. Conocen las señales de tránsito y que a los peatones les corresponde cruzar por las sendas peatonales”, sostuvo.

La iniciativa está destinada a los alumnos de cuarto grado en adelante pero se hace especial ahínco en aquellos de edad más avanzada que están próximos a sacar su primera licencia de conducir.

Luego de una charla y proyección de PowerPoint en el aula, se trabaja con los simuladores de manejo. “En ellos se hace un recorrido por un circuito virtual de distintas realidades y escenarios como zonas rurales y zonas urbanas de distintas características. Al transitar en ellas los alumnos experimentan no sólo el hecho de conducir, sino que además, el software planteará las diversas situaciones con las que nos podríamos encontrar en la vida real, calificando así el nivel de instrucción aprendido, permitiéndonos en la práctica modificar conductas durante el avance del juego”, comentó el funcionario.

Para González Belzunce esta política debe “generar en los estudiantes una conciencia desde pequeños y además llegar a los adultos, actuando los más chicos como el principal canal de diálogo con los padres”.

Este propósito tiene tres objetivos: trabajar conjuntamente con los docentes y alumnos en la formación de los más pequeños en normas de tránsito, instruir a los estudiantes de los establecimientos educativos de la provincia en Normas de Tránsito y Seguridad Vial, además de los derechos y obligaciones, y generar a temprana edad, conciencia y responsabilidad como usuarios de la vía pública.