Los abogados querellantes Carlos Pereira y Norberto Foresti, que representan a las víctimas en el segundo juicio por crímenes de lesa humanidad cometidos en San Luis durante la última dictadura militar (1976- 1983), presentarán una denuncia por posible falso testimonio contra los testigos Roberto Francisco López (ex capataz de la Cerámica San José), Francisco Nolasco Gómez (ex agente de Policía), Víctor Daniel Camargo (ex policía de la Dirección de Operaciones) Celso Clemente Riquelme (ex policía), Rafael Bernardo Baigorria (ex policía en Luján), Adrián Abel Bustos (ex policía de Luján), Raimundo Eduardo Gatica (ex policía de Luján) y Luisa Ramosca (panadera de la localidad de Luján).
A partir de este mes las audiencias serán tres jornadas, por la tarde del miércoles, todo el jueves y a la mañana del viernes.
“Por tratarse de un delito de orden público haremos la presentación por Fiscalía para que la secretaria del Tribunal tome las copias de las declaraciones y le sean remitidas al fiscal de turno para que se investigue la posible comisión del delito de falso testimonio”, anticipó Pereira.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal, integrado por los jueces Marcelo Alvero, Héctor Cortés y Oscar Hergott, se trasladó el viernes a Luján a tomar testimonios a cinco personas que eran testigos de la detención y posterior desaparición de Domingo Chacón, un ex empleado municipal.
Mientras que los otros tres habían atestiguado en la sala de audiencias el jueves, por el caso de la desaparición de Roberto García, (secretario General del gremio de Ceramistas) y Nolasco Leyes, (integrante de la Comisión Directiva del gremio), ocurridas el 20 de octubre de 1976.
Carlos Pereira señaló que estos testigos “han tomado la política de no recordar nada de lo que ya declararon en la etapa de instrucción de esta causa. Pese a que todos ellos reconocieron sus firmas en las actas de declaración que les mostró la secretaria del Tribunal”. Y destacó que “esta actitud es un modus operandi que están tomando porque evidentemente ven muy difícil su situación procesal. Porque no pueden justificar sus dichos sin estar comprometidos en la situación. Por ejemplo, alguno de ellos dijo que había hecho investigaciones secretas para la Policía, ¿eso cómo se explica?”.
Uno de esos testigos muy comprometidos es Roberto López, porque según Norberto Foresti: “Su situación está agravada porque en la audiencia señaló que con anterioridad a la desaparición de Roberto García y Nolasco Leyes, él mantuvo reuniones con un militar para cruzar información, y que ese militar le avisó que los iba a detener. También dijo que García y Leyes eran gente muy peligrosa”. Y explicó que cuando le pidieron la descripción del militar y le mostraron fotos, no pudo reconocerlo. "Con lo cual podría tratarse incluso de complicidad”, destacó el abogado.
Sobre este mismo testigo, Pereira indicó que “él relata de manera totalmente diferente a los familiares de Nolasco Leyes cómo fue la detención. Según López fue en el predio de la ex Cerámica San José, cuando se estaba bañando. E incluso detalló que se lo llevaron desnudo. Mientras que sus hermanos declararon que fue en su casa, de noche cuando volvía de trabajar y estaba siendo allanado su domicilio por militares".


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