Por ordenanza, San Francisco fue declarada ciudad Pro Vida

“Queremos cuidar a los más indefensos. Así como se quiere legalizar el aborto, también podría ejercerse la eutanasia y nosotros los católicos no queremos eso para nadie”, explicó Patricia Echenique, una de las catequistas de la Iglesia Sagrada Familia de la localidad de San Francisco del Monte de Oro, sobre la sanción de una ordenanza que declara al pueblo como ciudad Pro Vida. Es decir que el Municipio se comprometió a garantizar la existencia, no sólo desde el momento de la concepción, sino que, además a proveer a los ciudadanos con las mejores condiciones para el cuidado y preservación de la vida en todas las etapas.
La norma fue creada e impulsada por el Episcopado para frenar la aplicación de los protocolos de aborto y establecer una barrera ante la posibilidad de que, en el futuro, se despenalice esa práctica a nivel nacional.
“Uno de los artículos principales designa que el respeto a la vida se contempla desde que comienza, con la unión del óvulo y el espermatozoide hasta la muerte natural”, dijo Echenique y agregó: “Otro de nuestros objetivos es lograr ubicar en el cementerio de la localidad un lugarcito, que se llamaría ‘Los angelitos’ en el que se puedan enterrar a los niños que por alguna razón fallecieron”.
El Municipio y los representantes de la iglesia, brindarán contención a quienes lo necesiten. “Estamos trabajando con familias que en algún momento decidieron abortar y a través de charlas, apoyo psicológico o conversaciones con el sacerdote, se puede salir adelante”, afirmó la catequista y aseguró que en la secretaría de la Iglesia Sagrada Familia están los horarios en los que está disponible el Padre Rafael.
“Hay que ponerse en el lugar del otro y saber qué fue lo que llevó a esa persona a tomar esa decisión. Quien lo necesite podrá pedir ayuda profesional, hay que tratar de comunicarse y nosotros estamos disponibles para ayudar a quien lo necesite”, concluyó Patricia Echenique.