River extendió su fiesta y se coronó Supercampeón

River Plate consiguió en el “Juan Gilberto Funes” de La Punta su segundo grito de campeón en sólo seis días y logró el boleto que le faltaba, la clasificación a la Copa Sudamericana que se jugará después del Mundial.
Los de Ramón Díaz, derrotaron 1 a 0 con gol de Germán Pezzella  a San Lorenzo por la Súperfinal del fútbol argentino.
Desde el inicio, San Lorenzo salió más decidido a buscar el resultado, apuntalado en la velocidad de Villalba y Correa, pero las joyas del cuervo no estuvieron finos en los últimos metros de la cancha.
 A los 19’ llegó la más clara del primer tiempo para los de Boedo en los pies de Leandro Romagnoli. El 10 azulgrana capitalizó un rebote dentro del área grande, tras una mala salida de la defensa riverplatense, y su remate débil fue desviado al córner por Barovero.
Los minutos fueron pasando y River recuperó el balón y su juego creció desde los pies de Carbonero y Lanzini, este último tuvo la más clara para el “Millonario” a los 35’ con un remate cruzado desde 25 metros que salió cerca del  segundo palo de Torrico.
A los 45’ llegó una buena jugada preparada a la salida de un tiro libre para River y un remate de Vangioni  que se fue desviado.
El segundo tiempo empezó con la misma tónica de los minutos finales del primer tiempo, con los de Ramón Díaz dominando y siendo un poco mejor que el equipo de Bauza. A los 7’ el recién ingresado “Gio” Simeone  sin marca en el corazón del área no pudo conectar un centro fuerte de rojas desde la derecha.
El partido era disputado y con pocas chances pero  a los 27’ un centro justo de Lazini encontró a Germán Pezzella en el medio del área. El joven defensor peinó el balón y lo ubicó en el segundo poste, lejos del alcance de Torrico y desató la locura del público riverplatense.
A partir del gol  los de Bauza fueron a buscar el empate con más ganas que fútbol  y terminaron sin llevar peligro al arco de Barovero.  
El pueblo “Millonario” festejó de manera ejemplar, sin invasión de cancha y dedicándole el triunfo a su eterno rival.
La copa en las manos de Cavenaghi es un recuerdo que los puntanos fanáticos de River jamás olvidarán.