31°SAN LUIS - Jueves 28 de Marzo de 2024

31°SAN LUIS - Jueves 28 de Marzo de 2024

EN VIVO

La ciudad tiene otros dos baldíos que se transformaron en basurales

Por redacción
| 07 de mayo de 2014
Lo que no sirve, afuera. En la canchita del ATE 3 hay muebles viejos y escombros. | Marina Balbo

Son dos barrios distintos y separados por varias cuadras, pero el olor a podrido es el mismo y se hace insoportable. Al frente de los monoblocks del ATE 3, por la calle Narciso Gutiérrez, crece un basural que empieza en un container siempre rebalsado de desperdicios y se extiende por un descampado que está plagado de bolsas y que es paseo frecuente de todos los perros vagabundos del barrio. El otro depósito de residuos a cielo abierto está por la calle Profesor Berrondo en el ingreso al 208 viviendas. Y aunque la basura está escondida entre los árboles de un baldío, el tufo la delata. Si bien el camión recolector pasa por los puntos afectados, algunos habitantes de la zona aseguraron que el Municipio no ha dado respuesta a sus reclamos.
“Hace dos años que este contenedor está así. La gente lo ha usado como un basural e incluso vienen de otros barrios en unas camionetas último modelo para arrojar sus residuos. Tiran animales muertos y los que tienen comercios de alimentos dejan los desperdicios acá. Es un desastre”, comentó Celeste, quien tiene su despensa al frente de la canchita de fútbol donde está la montaña de mugre en el ATE 3. Y si bien aseguró que en las calles cercanas también hay problemas con los desperdicios y el mal olor que generan, el que más dolores de cabeza les trae a los vecinos es el que está en el descampado.
El container está saturado de envases de cartón y plástico, alimentos ya podridos, pañales, cubiertas de autos y huesos. Alrededor hay un sillón viejo, escombros, ramas y más basura para completar la postal de la cuadra. “A veces prenden fuego la basura y no se aguanta el humo que hay en la zona”, dijo Claudio, que vive a tres cuadras del baldío, pero pasa siempre por ahí para ir al supermercado. Y agregó que hace aproximadamente un mes y medio tuvieron que acercarse los bomberos, porque las llamas se habían descontrolado.
Según Celeste, los camiones de la Municipalidad levantan los residuos que están en el contenedor, pero la gente vuelve a llenarlos y a dejar en el piso las cosas que no entran.
En el barrio 208 viviendas no tienen la misma suerte. Rosa González, vecina y ex concejal de la capital, comentó que han hecho varios reclamos a la Intendencia por el basural que se forma entre los árboles que están a uno de los lados de la calle Berrondo, sobre un descampado. Pero no consiguió respuesta, al igual que cuando pidió que limpiaran el baldío para evitar inseguridad.”Si no, dejan amontonadas las bolsas en la esquina de Arancibia Rodríguez y después no las  llevan. Y los perros las desparraman”, contó la mujer.
Además, comentó que la mugre que se junta al frente de su casa atrae las moscas, mientras que Laura, otra de las habitantes de la zona, comentó que el olor es muy fuerte y que tiene que vigilar a sus hijos para que no vayan a jugar al descampado, porque hay todo tipo de desechos y pueden contraer alguna infección o lastimarse, ya que hay ratas y todo tipo de bichos. Entre la pila de basura, El Diario encontró bolsas, envases, escombros, latas y ramas. “La culpa es de la gente que tira todo ahí, pero a mí me parece que el área de Espacios Verdes tendría que mandar personal para que arregle ese terreno”, dijo Rosa.

 


LA MEJOR OPCIÓN PARA VER NUESTROS CONTENIDOS
Suscribite a El Diario de la República y tendrás acceso primero y mejor para leer online el PDF de cada edición papel del diario, a nuestros suplementos y a los clasificados web sin moverte de tu casa

Temas de nota:

Suscribite a El Diario y tendrás acceso a la versión digital de todos nuestros productos y contenido exclusivo