Caso Araneda: sería inminente el arresto de otro sospechoso

Quienes investigan el asalto en el que asesinaron de un tiro a Angélica Araneda aseguraron que está identificado otro de los jóvenes que entraron armados en la casa de la mujer que fue baleada hace seis días en su casa, en el barrio Ignacio Vidal de San Luis. Las fuerzas de seguridad se aprestan: su detención sería inminente, deslizó anoche una fuente de la causa.

Andrés Rojas declaró que la prueba que lo complica, un documento, fue "plantada".

El joven es “conocido de (Andrés Reinaldo) 'El Bibi' Rojas y (Cristian Walter) ‘El Mono’ Allende; forma parte del grupo, y también vive en el barrio Eva Perón”, confió la fuente.

Rojas fue detenido el miércoles 28 de mayo en un allanamiento en su casa, la 866 de la manzana 14 del barrio Eva Perón. En un tacho de basura, entre otros desperdicios, encontraron un documento de identidad hecho trizas, que resultó ser de Andrés González, el esposo de Angélica. La Policía presume que la banda puede haber llevado el documento adentro de la caja de metal que tenía los 15 mil pesos con los que escaparon. Los asaltantes sustrajeron, además, tres celulares y computadoras.

“El Mono”, según la Policía, se fue de San Luis el martes a la noche, es decir, unas horas después del asalto mortal. La juez Penal Nº 3 Virginia Palacios ordenó su captura el viernes 30. Hasta anoche no había novedades de su paradero. Hay referencias de que su destino fue una provincia vecina, en la que tiene familiares y conocidos.

En la casa de la abuela de Allende –es uno de los domicilios donde suele pernoctar, y fue revisado el miércoles 28– secuestraron una motocicleta roja a la que le falta parte del carenado. Su aspecto coincide con la descripción de testigos. La Policía presume que los delincuentes se movilizaban en ese rodado y en un automóvil, en el que los esperaba un cuarto cómplice.

“El Bibi” fue indagado por homicidio en ocasión de robo. Su decisión fue declarar ante la juez Palacios. “Contó que ese martes se levantó, llevó a su hijo a la escuela y después se fue con su señora al centro. Dijo que en el horario en el que ocurrió el hecho estaba en un cotillón, haciendo compras para el festejo del cumpleaños de su hijo, que fue el sábado pasado”, resumió una fuente.

Rojas aseguró que “le plantaron” el documento de González para incriminarlo. “No sabe si fue la Policía o algunos enemigos del barrio” que tendrían vinculación con el joven buscado y con el otro sospechoso que podría ser arrestado en breve.

Hacia una semana que “El Bibi” se había mudado con su familia al domicilio que fue inspeccionado. Está en la ochava noreste, con el frente hacia el sur, hacia una calle de tierra que tiene sólo una cuadra. El costado oeste, que da a una calle de tierra que se transita de norte a sur, está cerrado con un cerco de tarimas. No hay vereda, todo es una continuidad de tierra. Y en lo que sería la vereda oeste, hay escombros y basura.

Rojas dio a entender “que como su casa está abierta, cualquier persona pudo entrar en el patio” e introducir el documento. La Policía dijo que lo halló en un tacho que estaba afuera de la vivienda, cerca de la puerta trasera, dentro de una bolsa de consorcio con basura.

Rodolfo Mercau, su abogado, no le había pedido a la juez ninguna medida, al menos hasta ayer. Sólo le aconsejó a su cliente que declarara y pidió en préstamo el expediente, para ver qué prueba de cargo incorporaron los investigadores de la División Homicidios en el expediente.