De nada le sirvieron las excusas a uno de los dos chicos de 16 años involucrados en el asesinato de Angélica Araneda. Fue el primero en entregarse a la Justicia, el jueves pasado. Y aunque se adjudicó solo una función pasiva en el asalto mortal, la juez Penal Nº 3, Virginia Palacios, lo procesó como coautor de homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma de fuego.
El procesamiento del adolescente del barrio Eva Perón fue resuelto en las últimas horas del sábado por Palacios, medio día antes de que la división Homicidios y otras divisiones de la Policía capturaran a Cristian “el Mono” Allende, de 27 años, el tercer implicado en el crimen.
Con la captura de Allende, concretada ayer a la tarde en el barrio El Lince, se completó el trío que habría participado en el asalto, según los indicios y declaraciones recogidos por la Policía y la Justicia.
Por si no bastaba con la confesión del adolescente de que había participado en el robo a mano armada en la casa de Araneda, en la esquina de San Francisco y Tilisarao del barrio Ignacio Vidal, anteayer la hija de la mujer asesinada lo señaló en una ronda de reconocimiento.
Su estatura alta, su contextura delgada y sus ojos claros se habían grabado en la retina de la víctima. La chica de 18 años y su hermanito de 11 sufrieron el asalto junto a su madre, la mañana del martes 27 de mayo.
El menor acusado admitió ante la jueza que llegó a la casa de Araneda en moto junto a dos vecinos suyos: otro chico de 16 años, que se entregó a la Justicia anteayer, y Cristian “el Mono” Allende.
Aunque dijo que pensaba que no había nadie en la casa, que fue el último en entrar, sin armas, y al ver a tres rehenes les dijo a sus amigos que se iba, la hija de la mujer asesinada le asigna un papel activo en el robo: "Tenía un arma en la mano derecha y me dijo 'dale, entregá (la plata) o te mato", declaró la víctima.
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