Parece que la chica de 13 años no soportó la angustia y se lo contó a su mamá el sábado a la tarde. Relató que ese mismo día, más temprano, su medio hermano de 31 años la llevó a su casa, en el barrio 500 Viviendas sur, en San Luis, con el pretexto de que le cuidara los niños.
Pero sus hijos no estaban allí. Él le propuso que fueran a buscar una gaseosa. La chica supone que el hombre puso en la bebida alguna sustancia que la adormeció. A pesar de ello, la adolescente aseguró recordar que su pariente la llevó a la habitación matrimonial y la violó. Se lo confió a su madre, pero ésta, a pesar de que fue a una comisaría, no hizo denuncia, informó la Policía. Creen que quiere evitar que su hijo sospechado, quien ha estado detenido, vuelva a una celda.
Por jurisdicción, las averiguaciones corresponden a la Subcomisaría 23ª. El jefe de esa dependencia, comisario Gustavo Ríos, precisó que actúan de oficio, que se comunicaron funcionarios del Juzgado del Crimen Nº 2 y que prevén entregar las actuaciones hoy.
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