Aconsejan hidratar a los perros por las altas temperaturas

Las altas temperaturas no sólo lo padecen las personas, sino también los perros. Los veterinarios aconsejan mucha hidratación durante todo el día, una alimentación balanceada y cuidarlos de los rayos del sol porque pueden sufrir quemaduras. En caso de que la familia decida salir de vacaciones y  llevar a su mascota, los profesionales señalan que  siempre debe estar sujeta con un arnés y que el vehículo tenga temperatura agradable.
“Hay que darles la comida o muy temprano o tarde a la noche para que la digestión no sea muy pesada porque en esos horarios las temperaturas no son tan altas. Es fundamental mucha agua, si están al aire libre mojarlos dos o tres veces al día y que tengan sombra. Las recomendaciones son sobre todo para aquellos que se encuentran en el exterior de la casa. Tuvimos casos de perros con insolación porque los dejan en el patio y hay que tener mucho cuidado”, recomendó Walter Guzmán, veterinario.
Señaló que durante el verano la mascota puede sufrir, además de insolación, deshidratación y hasta golpes de calor.
“Hay que tener cuidado con el corte de pelo,  porque los dueños creen que si les sacan el pelaje les alivian el calor. El pelo es aislante y se recomienda cortarlo pero no muy al ras, sino dejarle 2 o 3 centímetros de largo. Así, el animal no queda expuesto a los rayos del sol y evitamos un posible golpe de shock térmico”, explicó Guzmán.
El veterinario Martín Rodríguez señaló que “las mascotas más sensibles son las que tienen pelo blanco. Hay que protegerlos del sol en las horas de paseo. La exposición puede producirles quemaduras de primer o segundo grado”.
En las vacaciones muchas familias llevan a sus mascotas y viajan con ellas en el auto. En Buenos Aires se desató una polémica por unas jaulas improvisadas adosadas a los paragolpes traseros. "Es una extensión del vehículo que no está permitida. El perro queda expuesto al sol permanente e inhala el monóxido de carbono de los otros vehículos. Además, tiene mucho riesgo porque va expuesto a golpes”, afirmó Guzmán.
Puntualizó que hay una sola recomendación para viajar con el animal y es que no vaya suelto en el auto. “Vienen arneses que se ajustan donde se coloca el dispositivo del cinturón de seguridad y rodean el cuerpo del animal. Cuestan entre los $120 y los $200,   vienen de distintos materiales y son regulables”, contó.
Rodríguez manifestó que hay que brindarle al animal confort en el viaje, con un ambiente con una temperatura normal y bien ventilado. “Cuando son muy largos hay que parar para que la mascota estire su cuerpo, camine, se relaje y vaya al baño. Hay dueños que se acercan a las veterinarias para comprar sedantes para los animales que sufren de  estrés en el auto. Pero esta medicación tiene que estar siempre bajo el control de un profesional, porque puede producir un efecto contraproducente en el animal”, advirtió.
En las fiestas de Fin de Año, donde se usa mucha pirotecnia, los profesionales aconsejan el uso de tranquilizantes para disminuir el padecimiento de las mascotas, cuyo oído magnifica el sonido de los petardos. Una de las opciones es  ponerles algodón en los oídos en una habitación oscura en la que no haya vidrios ni espejos para que no se lastimen, y música fuerte para que no sientan los estruendos.
“Siempre es bueno darle las gotitas tranquilizantes unos días antes para ver qué efecto  les genera. Pero es importante que el animal no tenga ningún antecedente cardíaco ni un trastorno hepático o renal. Todas estas precauciones tienen que estar bajo la supervisión de un veterinario”, expresó Guzmán.
Rodríguez aclaró que estos medicamentos producen su efecto después de los 15 o 20 minutos, dependiendo del animal, y por eso es necesario dárselos media hora antes de la medianoche, horario pico de los estruendos.
“Los perros que son atados en el patio suelen asustarse más, se sueltan y se pierden. Esta Nochebuena no tuve conocimiento de tantos casos de animales extraviados porque hubo menos pirotecnia”, dijo.
También indicó que en Navidad y Año Nuevo es muy común la indigestión de las mascotas porque los dueños le dan las sobras. “Durante el año el hábito de comida es muy distinto. Consumen comida balanceada y este cambio puede provocarles problemas hepáticos o intestinales. Por eso no hay que modificarle la alimentación durante las fiestas”, aconsejó.