Iraida García fue la gran protagonista de la tercera etapa del Tour Femenino. La cubana, por media bici, se quedó con la gloria en Merlo, y dejó con las ganas a la brasileña Clemilda Fernandes. La vencedora clavó los relojes en 1h43'09" para los 63,4 kilómetros. A pesar del triunfo de la caribeña, la general sigue en poder de Hannah Barnes, la británica que fue la dueña de las dos primeras jornadas.
Brasil y Cuba salieron decididas a escaparse para sacarle una buena brecha a Hannan Barnes, pero la británica se las bancó y se quedó con la primera meta sprinter.
La carrera fue muy dura. Los primeros cuatro kilómetros fueron toda subida. Las chicas sintieron el esfuerzo de escalar y el pelotón se rompió en varias partes. La mayoría sufrió la etapa porque a la montaña hubo que sumarle una temperatura de 34º que complicó el andar de las chicas.
Clemilda Fernandes salió con todo. A la integrante de la Selección de Brasil le gusta trepar y salió a atacar desde el vamos con la intención de quedarse con alguna meta volante, pero la gloria en la montaña quedó en manos de su compatriota Camila Coelho, que fue escoltada por Da Silva (FUNVIC) y Vargas, de Colombia.
La primera parte dejó su huella, porque las pedalistas hicieron mucho desgaste y sintieron el esfuerzo. No hubo fugas, pero la caravana quedó muy dividida. Adelante las escaladoras. Atrás las sprinter. Después vino el turno de una bajada muy pronunciada y ahí las chicas aprovecharon para imprimir más ritmo y acelerar.
Brasil y Cuba salieron decididas a escaparse para sacarle una buena brecha a Hannan Barnes, pero la británica se las bancó y se quedó con la primera meta sprinter.
Luego fueron en busca de Carpintería, para pasar después por Santa Rosa. La caravana seguía muy dividida, pero las de atrás, después de pasar el sofocón de la trepada, cambiaron el aire, se acomodaron y comenzaron a achicar la distancia con las de adelante.
Italia encontró su momento en la carrera y fue para arriba. La Selección "tana", más el Foton Servetto y el Cipollini pasaron a comandar las acciones, pero sin fugas. Hubo una pequeña diferencia que no superó los tres segundos y ahí nomás el intento fue neutralizado, pero alcanzó para que Cecchini ganara la segunda meta sprint.
A 25 kilómetros de la meta se escaparon cinco ciclistas. Fueron para adelante Ryan (Unitedhealthcare), Oliveira (Cipollini), Paladín (Italia), Lionco (Brasil) y Tetrik (Xiraya), llegaron a sacar diez segundos de ventaja, después se sumaron tres más a esa fuga, pero duró pocos kilómetros porque fue neutralizada. Con la llegada de la neutralizada apareció otra escapada, Tetrick (Xiraya) se fue para adelante y sacó veintidós segundos de ventaja. Parecía que iba a abrazar la gloria. A un kilómetro de la meta mantenía la ventaja, pero salió despedida para adelante Clemilda Fernandes, ahí nomás se fue a buscarla Iraida García y a ciento cincuenta metros de la meta la alcanzaron, también la capturó el pelotón. Quedaron mano a mano la brasileña y la cubana, pero por media bici, García aventajó a Fernandes y se quedó con la etapa.
Después quedó tiempo para el abrazo cubano. El festejo de la etapa fue caribeño, pero la general sigue en manos de Barnes.
El miércoles será el turno de la contrarreloj en El Durazno y puede cambiar la punta.
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