Investigan si abusaron de un discapacitado en una escuela

La madre de un chico de 18 años dijo que en particular la noche del miércoles notó que a su hijo algo raro le sucedía. Estaba inquieto. Se tocaba de vez en cuando la parte trasera del pantalón, como si algo ahí le incomodara. Cuando la mujer le preguntó qué le pasaba le dijo que “algo en la cola le molestaba”. Cuando empezó a calar más hondo con sus preguntas, el joven le confesó que ya no quería ir a la escuela para discapacitados de Villa Mercedes a la que va desde hace unos años. El motivo era, según él, que alguien de ahí lo abusó sexualmente.

El juez está a la espera del informe médico, para corroborar si existió un abuso sexual.

La mujer se percató del extraño comportamiento de su hijo alrededor de las 23. Después de escuchar la confesión del muchacho, llamó una ambulancia para que un médico lo examinara cuanto antes. Y, sin poder esperar a la mañana siguiente, tres horas después se fue a la Comisaría 8ª.

En la denuncia asentó que su hijo le dijo que, hace unos días, un individuo, a quien él mencionó por su nombre, lo había violado. Los efectivos que le tomaron su declaración le recomendaron que, además de denunciar el hecho en la Policía, lo mejor sería hacerlo también en el juzgado.

Entonces, ayer a la mañana fue hasta tribunales. Casi de inmediato, el juez de Instrucción Penal N° 2, Leandro Estrada, solicitó que el discapacitado fuera revisado por el médico forense Horacio Sosa de los Santos. “Todavía no me han informado los resultados de ese estudio”, dijo ayer, pasadas las 18, el magistrado, cuando El Diario lo consultó.

En seguidilla con esa medida, el juez autorizó el allanamiento de la escuela. Cerca de las 13:30 los policías fueron hasta el instituto, ubicado sobre calle Almafuerte, pero como no había nadie no pudieron llevar adelante la requisa. Lo que buscaban era, al parecer, un pañal, comentó Estrada.

El joven que habría sido abusado vive en una humilde casa del barrio Eva Perón. El chico tiene dos hermanos varones, que como él, tienen capacidades diferentes, y cuatro hermanitas. Pero las nenas casi no residen ahí, porque están al cuidado de una Familia Solidaria, dijo una fuente.

Esos hermanos, uno de 22 años y otro menor de edad, también asistían a esa escuela. Pero, por estos días, sólo el varón del medio lo hacía, indicó su mamá en la denuncia policial.

Por esta época, el colegio se convierte en una colonia de verano. Como muchos de los alumnos son de escasos recursos, los directivos contratan una Trafic exclusivamente para buscar y llevar los chicos a su casa.

El muchacho estaba en la colonia de ocho de la mañana a dos de la tarde. Disfrutaba de la pileta y comía en la colonia.