El hotel Potrero de los Funes tendrá 4 suites flotantes más

Es casi imposible que quienes salen a correr o caminar, cotidianamente o durante los fines de semana, alrededor del circuito internacional de Potrero de los Funes, no hayan notado las estructuras metálicas ubicadas sobre la entrada al hotel. “Están allí porque se están armando cuatro habitaciones flotantes. La obra se completa con las otras cuatro, que hicimos antes. No teníamos el dinero para hacerlas todas juntas así que a fines de diciembre la línea costera de 8 habitaciones, estará terminada”, explicó el gerente general del cuatro estrellas con vista al lago, Leonardo Agnesi.

Cada isla mide cincuenta metros cuadrados, sobre ellas están asentadas las suites cuya mitad, con vista al lago está compuesta por enormes ventanales.

Además de poder disfrutar la tranquilidad y la belleza de Potrero, la propuesta es completa porque cada habitación tiene un sommier king size, una pantalla led de 42 pulgadas con señal digital, una cava de vinos, un frigobar, un microondas, una cafetera nespresso, una caja de seguridad, una ducha escocesa y posee iluminación led. Además cada isla tiene un balcón vidriado con sillones. “Cada espacio es muy cómodo y está pensado  para una pareja, porque son dobles”, dijo Agnesi.

Otro de los aspectos importantes que ofrecerá el hotel internacional Potrero de los Funes es un carrito de golf que llevará a los huéspedes hasta sus habitaciones. “Estará en la entrada de la cochera hasta la última isla flotante, son aproximadamente doscientos metros de recorrido. Cada personas atravesará las rotondas y llegará con su equipaje hasta la puerta”.

“En proporción estas habitaciones son las que más se venden, la gente las elige porque gustan mucho. Inicialmente cuando ideamos las estructuras, estaban pensadas para la época estival. Pero la gente las elige con cualquier clima, aunque esté lloviendo, porque les  hace vivir una experiencia diferente. Nos han dado muy buenos resultados y ahora que serán ocho estamos felices”, expresó.

Antes de iniciar el proyecto se hicieron estudios de impacto ambiental. “La construcción y los materiales que tienen contacto directo con el agua, no se corroen no se degradan con el tiempo y no contaminan el agua”, hizo hincapié Agnesi y agregó que el sistema cloacas, de cada una de las islas funciona con un tanque de acero inoxidable, del que se trituran y bombean los residuos, que luego van por una cañerías hasta el sistema de cloacas del hotel.

“En el área de piscinas externas construimos un jacuzzi gigante, que tiene una capacidad para doce personas. El agua es climatizada y cuenta con un sistema de hidrojets que expulsan burbujas, además está iluminado ya que brindamos un servicio de cromoterapia”, especificó.

Quienes deseen relajarse también podrán disfrutar del spa que está abierto a todo público, como también el restaurante y la confitería flotante. Además de jueves a domingo hay shows, a partir de mediados de diciembre serán de lunes a lunes. El edificio cuenta también con un microcine con 60 butacas.

La temporada baja no es un problema para el gerente general del hotel ya que en cualquier época del año, son muchos los turistas que llegan a hospedarse. “Las tarifas están entre los 1.300 y los 2.600 pesos, y en pleno verano los precios oscilan entre 1.500 y los 3.000 pesos. Normalmente tenemos lleno todos los fines de semana ya no importa la época del año, lo tenemos al cien por cien. Sí notamos la diferencia durante la semana, porque disminuye a la mitad el número de huéspedes”, dijo Agnesi y agregó que el promedio anual de ocupación es del 70 por ciento, más las actividades de congresos y convenciones que se organizan allí.

Agnesi afirmó que el sesenta por ciento de los viajeros proviene de Buenos Aires y el resto arriba desde diferentes provincias.

El costo total de la obra es de cuatro millones y medio de pesos. En el valor está incluido el sistema de elevación para llevar el carrito hasta las plataformas. Los fondos para mejorar el enorme complejo son propios.