Kameleba volvió a rugir en el Cosquín Rock

Si la tercera es la vencida, con su cuarta participación en Cosquín Rock, "Kameleba"  juega de local.
Lo anticipó José Palazzo en nota exclusiva con Etc: “Están en una grilla soñada, porque son las mejores bandas de reggae del país. Es un seleccionado”, se entusiasmaba el organizador en los días previos.
Los villamercedinos se presentaron en los festivales rockeros más convocantes de la república, y volvieron a pisar el Escenario Temático Reggae, junto a Nonpalidece, Ridim y Gondwana.
Aunque parecía que se daba una invitación entre bandas amigas, Darío Alturria decidió guardarse. “Me quedé tranqui por el brazo -se quebró- y en realidad no íbamos: debí viajar con prescripción médica”.
Cantó solamente con su grupo, no como suponía Palazzo, “así que sólo quemé los cartuchos con Kameleba” contó riendo el vocalista.
“La ambición desmedida me llevó a esta instancia”, confesó el cantante sobre su accidente, “fueron unas dosis de adrenalina en patineta”.
Darío llegó unos días antes a Córdoba, para aclimatarse, mientras el resto lo hacía después.
La anécdota de la tarde fue que casi no llega al show porque se paró la combi que lo llevaba (sus compañeros fueron aparte y tenían los equipos listos). La solución fue de película: lo llevó un hombre en moto, al que paró en la calle, “lo persuadí de la mejor manera y me trajo al predio”, dijo riendo.
Pasadas las 19 horas, “Experiencia rasta” fue el primero de los temas que sonaron.
“Buenas tardes, Cosquín”, saludó Darío y lanzó su grito de batalla: “¿¡Se siente el reggae!?” en plena intro de “Intuición”. Y sí, se puede hoy.
Pegadito entró “Sueño que va”.En el día de los enamorados no faltaron las baladas, como “Cartas viejas” o “Con vos”, ni las menciones a las chicas que se balanceaban cerca de la barda. Pícaro.
“Yeah ¿cómo está la gente ahí?” agitaba a los primeros, mientras dio un tropezón en las tablas, y rápido aclaró que “¡antes que un golpe prefiero un porrazo, siempre!”.
Con el sol de frente pero con brisa serrana a favor, hicieron una intro acústica para “Orillas”, con el estribillo regalado a las voces del público.
“Necesito las manos de la gente arriba”, dijo con la derecha suya  enyesada por el accidente extremo, y comenzaron “Todo lo que tú quieras”, con teclas y vientos predominantes. Kameleba y su nuevo “style massive”.
“¡Hasta siempre, Córdoba!” rugió Alturria. Y así se despidieron los rastas del Sur.