Se fue un año con el consumo por el piso

Casi nadie relacionado con el campo va a extrañar el 2014. Quizá algunos ganaderos hayan podido defender sus márgenes de ganancia apelando a un trabajo esforzado y cierto rebote en los precios de los reproductores. Pero en general, a todos les ha ido igual o peor que en 2013 en un país con un gobierno nacional que mira al campo con desdén, lo ahoga con retenciones e impuestos y cree ver un golpista detrás de cada vaina de soja o grano de maíz.

El caso de las cosechadoras es notable: se vendieron 66% menos que en 2013.

Distintos cables de la agencia Noticias Argentinas dieron cuenta de la caída del consumo, que fue casi un derrumbe en algunos rubro.s Todo fue para abajo, aún los artículos de primera necesidad: cosechadoras, tolvas, camionetas y exportaciones de agroquímicos, entre otros, terminaron el año en negativo respecto de 2013, que ya no había sido muy floreciente que digamos. Habrá que ver qué pasa en 2015, un año eleccionario y en el que el Gobierno no amaga con ningún cambio beneficioso para los productores, que deberán seguir rezando para que no les  agreguen costos, o bien para que algún funcionario caritativo suba los cupos de exportación a niveles al menos aceptables para un país que supo abastecer con sus carnes y granos al mundo entero.

El caso de las cosechadoras es notable: se vendieron 66% menos que en 2013. Y menos mal que el acuerdo con Venezuela las incluye, porque de las pocas que salieron del país la mayoría fueron a parar a la república bolivariana. Unas 50 cosechadoras argentinas de un total de 75 máquinas exportadas en 2014 se enviaron a Venezuela, lo que de todas maneras significa menos de la mitad que en los últimos dos años. La exportación de cosechadoras a todos los destinos externos ingresó divisas por 18,6 millones de dólares. Vassalli Fabril (Don Roque) fue el más beneficiado con 11,1 millones de dólares, sostuvo el sitio Valor Soja en un informe.

La diferencia con 2013 es importante ya que en ese año se habían declarado ventas externas de 153 cosechadoras por un total de 38,1 millones de dólares, de las cuales 107 fueron equipos colocados por Vassalli Fabril en Venezuela, mientras que en 2012 las exportaciones totales fueron de 167 unidades por 36 millones de dólares (127 fueron para Venezuela). En 2014, la filial local de la alemana Claas declaró exportaciones de 15 equipos a Paraguay, seis a Uruguay y cuatro a Bolivia.

En cuanto a las camionetas, el campo sigue siendo el mejor cliente de terminales como Ford, Toyota, Volkswagen y Chevrolet, pero los números también fueron a la baja. En 2014 se vendieron más de 65.000 camionetas agropecuarias, una caída de un 11% respecto de 2013, según datos de la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara). Pudo haber sido peor, pero el precio internacional de la soja se mantuvo firme hasta julio y luego el Gobierno otorgó algunas facilidades (Plan Pro-CreAuto) para sacar vehículos utilitarios cero kilómetro.

Si bien se trata de una cifra 11,2% inferior a la de 2013, es 6,6% y 11% más elevada que la registrada en 2012 y 2011, respectivamente. En abril y mayo de 2014 –plena cosecha gruesa– los productores argentinos se encontraron con precios de la soja superiores a los presupuestados. "Eso motivó que muchos decidieran aprovechar el momento para cambiar granos por ruedas. No se equivocaron porque en el segundo tramo de 2014 los valores de la oleaginosa se derrumbaron", señaló el informe. En 2014 el liderazgo en el segmento de "camionetas agropecuarias" lo mantuvo Toyota Hilux con un 42.2% del mercado, seguido por Ford Ranger y Volkswagen Amarok con un 25.2% cada una, mientras la Chevrolet S-10, la única que no entró en el ProCreAuto, quedó con apenas un 7.5%.

Las tolvas, por el embudo

La exportación de tolvas o embudos de gran tamaño utilizados en el sector agropecuario bajó 20% en 2014 y generó divisas por sólo 10,4 millones de dólares, mientras que apenas seis empresas concentran el 70% del negocio, según un informe. En 2014 se declararon exportaciones argentinas de 599 tolvas por 10,4 millones de dólares, en tanto que se fueron 766 equipos por 13,3 millones de dólares en 2013, indicó el sitio Valor Soja.

La mayor parte de las ventas externas registradas en 2014 corresponden a Cestari, con 1,86 millones de dólares (17,8% del total declarado en el período), seguida por Akron (12,5%), Ombú (11,4%) y Montecor (11,1%). También vendieron la filial argentina de John Deere (10,6%), Ascanelli (7,9%), Agromec (4,5%), Richiger (3,5%), Comofra (3,3%) y Pony (2,9%), entre otras empresas de un mercado bastante deprimido.

Los principales destinos de exportación en 2014 fueron Uruguay con el 42,5% del monto en dólares total declarado, seguido por Paraguay (20,8%), Rusia (6,3%), Australia (5,2%), Bolivia (4,2%), Chile (4,1%), Brasil (3,7%), Turquía (2,7%), Sudáfrica (2,5%) y Francia (2,1%), entre otros mercados.

Otro sector con buena aceptación en el exterior es el de los agroquímicos, que también sufrió un deterioro en sus números finales. Las exportaciones de agroquímicos cayeron 26,3% en los primeros once meses de 2014 en volumen respecto del mismo período de 2013. Por el contrario, el consumo de fertilizantes nitrogenados subió 9,5%, con 1,7 millones de toneladas, lo que indica que los productores siguen apostando a una buena cosecha a pesar de los contratiempos que provoca la economía.

Esto ocurrió "a pesar de la elevación de precios y de la pérdida de rentabilidad de la producción agropecuaria (especialmente en trigo, principal demandante de este fertilizante) que reduce inversiones", indicó un informe de la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales.

En dólares, la caída no fue tan pronunciada (7,7%) como en cantidades, pero ayudó la suba del 25,2% del precio de los productos en los mercados extranjeros. Las empresas pasaron de vender por 586,3 millones de dólares en 2013 a  a 541,1 millones, lo cual revirtió la tendencia positiva en valores observada en el total del 2013 (10,8%).

Los destinos de las exportaciones de agroquímicos y fertilizantes en el acumulado de once meses de 2014 se concentraron en el mercado regional, especialmente en diez países. Brasil, con el 42,8%, es el primer destino, seguido por Paraguay con el 16,7%, Uruguay (14,1%), Bolivia (8,6%), y Chile en quinto lugar, con el 8,5% de participación sobre el total exportado en el período analizado.

En lo referido al origen de las importaciones, dentro de un escenario dispar en cuanto a magnitud, se produjo un cambio de importancia: China volvió a encabezar el lote de países proveedores, con el 33,7%, al desplazar a los Estados Unidos al segundo lugar, con el 24,8%; mientras que Rusia pasó a ocupar el tercer lugar, con el 10,9%.