Después de dos meses de rondas nocturnas sin fiestas clandestinas, los inspectores de la Unidad de Control e Inspección Municipal (UCIM) debieron actuar, la madrugada del domingo, en una quinta en las cercanías del dique Vulpiani. Fueron alertados por un llamado que ingresó al Sistema Único de Reclamos 147 y, cuando arribaron, constataron que el predio no contaba con habilitación para realizar eventos y no cumplía con las medidas de seguridad necesarias. Además, había 1.500 personas a las que les habían cobrado una entrada de 40 pesos. Con el apoyo de la Policía de la Provincia desalojaron a la gente y clausuraron el lugar.
La denuncia al 147 fue recibida cerca de las 4:30 de la mañana. La quinta está en el camino que llega hasta el dique Vulpiani, que nace en la rotonda de la ruta Nº 55, justo frente al Colegio Nº 14 "Luis Lucco". La policía colaboró en el operativo y estableció dos controles: uno frente al establecimiento educativo y otro frente al predio. "Los inspectores relataron que había unas 1.500 personas, de diferentes edades. Era una fiesta en la que cobraban 40 pesos de entrada, pero no está autorizado, no tiene habilitación para fiestas y no cuenta con las medidas de seguridad", detalló Teresita Ludueña, a cargo del programa.
Al momento de la inspección, el propietario no estaba en el predio pero fue incorporado en el acta junto con la organizadora que fue identificada en plena clausura. "Los únicos lugares en los que está permitido desarrollar festejos (de esa magnitud) son los boliches y locales nocturnos, salvo que sea una fiesta privada. Bajo ningún punto de vista ésta era una fiesta privada cuando hay un cobro en el ingreso y hablábamos de 1.500 personas", sostuvo la funcionaria.
Los inspectores no realizaron el decomiso de bebidas alcohólicas porque aparentemente el consumo había finalizado.
Aunque es la primera intervención del UCIM en un festejo, no es la primera vez que el dueño de la quinta es intimado. "El año pasado ya habíamos detectado y clausurado una fiesta clandestina en el mismo lugar. Estas fiestas no pueden contar nunca con habilitación, no es que no las gestionaron, no tuvieron tiempo o no pudieron venir, no se autorizan en estos lugares porque no cumplen con las condiciones mínimas de seguridad", enfatizó Ludueña.
Uno de los peligros en la zona aledaña al dique es que el camino es de tierra y ripio y no tiene iluminación. "Nuestra preocupación es que es una zona peligrosa, inhóspita a lo que hay que sumarle que el sector estaba en alerta por las crecidas del río Quinto. Y el tema es que para evitar al sanción están haciéndolas en lugares alejados de la ciudad", detalló la encargada de UCIM.
El acta de infracción fue girada al Tribunal de Faltas para que establezca la sanción.
Recomendaciones
El área de inspección solicitó que quienes asistan a celebraciones de esta particularidad tengan
en cuenta que el lugar debe estar habilitado y contar con personal de seguridad, el seguro de responsabilidad civil por si hay algún daño o persona herida, un servicio de emergencia de ambulancias y matafuegos en el caso que ocurra un siniestro; y que los dueños de las quintas informen sobre las limitaciones de la propiedad.
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