Padres y docentes ayudan en la refacción de la escuela Belgrano

Ayer, Manuel Funes, profesor de Lengua y Ciencias Sociales de 5º grado, dejó los libros y tomó el balde y la cuchara para ayudar a arreglar su escuela. Es docente del colegio Nº 3 "Manuel Belgrano",  y junto otros maestros, padres, tutores, directivos y miembros del Ministerio de Educación decidieron ayudar en la reparación del edificio. A través de un programa de mejoramiento, supervisado por una comisión, lijarán, pintarán y arreglarán algunos detalles los fines de semana para dejarlo en condiciones para el 3 de junio,  fecha en que se celebrará el aniversario del establecimiento ubicado en avenida Perón y Pringles. 
“Fue una iniciativa de los padres que se ofrecieron a venir y ayudar en lo que pudieran para adelantar los trabajos. Algunos saben de albañilería y van a asesorar”, contó Eduardo Benítez, director del establecimiento. Más allá de la colaboración, todos esperan que salga un llamado a licitación   para encarar una mejora general del colegio. 
 Los primeros en llegar ayer a la mañana fueron Benítez, Funes y Leonardo Córica,  Jefe del Programa de Infraestructura y Sociedad del Ministerio de Educación. Cerca de las 10:30 se acercaron algunos padres y comenzaron a recorrer las instalaciones.
“Lo que quedan son unos detalles de pintura porque ya colocamos la membrana del techo de la galería. Personal de Infraestructura seguirá trabajando durante la semana para terminar con algunas otras cuestiones”, aseguró Córica. 
El funcionario indicó que los materiales los pone el Gobierno, pero no rechazó que los padres hagan aportes. “El profesor trajo unos baldes con arena para empezar a rellenar algunos huecos y algunas herramientas para trabajar. El año pasado un papá nos regaló unas baldosas”, señaló Benítez. 
Marcela González, madre de dos alumnos de primero y tercer grado dijo que “en los últimos años son muy pocas las refacciones que hicieron en la escuela y es una lástima. Vinimos con mi marido a ayudar pero no es nuestro trabajo,  si no que es obligación del gobierno”, aseguró.
La idea es que  para el cumpleaños Nº 130 de la escuela, que es considerada como patrimonio provincial, puedan estar listas   las reparaciones en las paredes y el techo. "Primero vamos a lijar, después poner enduido y finalmente pintar. Hay que hacerlo en etapas porque tiene que secar el material”, explicó Funes. 

Protesta 
El 30 de marzo, al menos treinta padres de chicos de la escuela cortaron el tránsito en Perón y Pringles. Pedían a las autoridades el arreglo urgente de las instalaciones porque temían por el bienestar de sus hijos. En el colegio, las clases empezaron una semana después por demoras en los trabajos de mantenimiento, incluida la colocación de membranas en los techos.