Aparentemente el “carisma” de Diego Sebastián Medina había logrado que en pocos días una mujer de 90 años y su hija de 66, ambas docentes jubiladas –de quien la policía preservó su identidad- tuvieran confianza en él y lo dejaran realizar trabajos en su vivienda, e incluso almorzar con ellas. Pero en unas pocas horas que las mujeres destinaron para dormir la siesta fueron suficientes para que Medina abusara de esa cordialidad y huyera que 20 mil pesos que tenían destinado para pagar trabajos de albañilería.
Medina fue detenido unas horas después en Villa Mercedes, gracias a un trabajo conjunto con policías de San Luis. Paseaba con su familia por el centro mercedino mientras aprovechaba para “hacer compras”. Ahora se encuentra alojado en la Comisaria Primera de San Luis.
Fuentes policiales informaron que el joven, de 25 años, con domicilio en Villa Mercedes y con antecedentes por robo y resistencia a la autoridad, había sido contratado en San Luis por un constructor de apellido Nesprías, a quien ayudaba en distintos trabajos de albañilería.
Actualmente trabajaban en la casa de la anciana, en el centro de la Ciudad, donde reparaban las instalaciones de cloacas. El sábado al mediodía lo encontró a Medina en pleno trabajo por lo que las mujeres lo invitaron a almorzar con ellas.
Luego, según relató la damnificada, decidieron tomar una siesta mientras el hombre continuaba con sus tareas.
Cuando madre e hija se levantan, Medina ya no estaba. Tampoco los 20 mil pesos que la anciana guardaba en su cartera y que estaba destinado al pago del trabajo de Nesprías y de la compra de materiales.
La mujer rápidamente relaciona el faltante del dinero con Medina y llama a Nesprías para solicitarle que lo ubique. Este se dirige a la casa de su empleado en el barrio Eva Perón de San Luis y se percata que había abandonado la casa, por lo que hace la denuncia policial.
A partir de allí se establece que Medina se había ido con su familia a Villa Mercedes en un taxi de la empresa Norte por el que había pagado unos 500 pesos. A través de los Centros de Emergencias de San Luis y en Villa Mercedes coordinan la detención del hombre que se da a las pocas horas del hurto.
La policía logró conocer que había descendido del taxi en las calles Zabala Ortíz y General Paz y que había comprado al menos cuatro pares de zapatillas y prendas de vestir en las tiendas de la ciudad villamercedina.
Finalmente, Medina es detenido por una patrulla de la Comisaría del Menor y del Comando Radioeléctrico de Villa Mercedes, todavía con 10 mil pesos sin gastar.
El joven fue trasladado primero a la Comisaría 9° y después a San Luis.
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