Miedo y bronca. Estos dos estados de ánimo describen a gran parte del personal de la Escuela Nº 312 “República de Chile”, donde tienen que levantar, una vez más, la pared que da al playón deportivo. Afirman que esta vez no cayó por accidente, sino por un hecho de vandalismo. Luego de arreglar durante las vacaciones de invierno el paredón que los separa de la avenida Fuerza Aérea (en abril lo chocó un auto que despistó), los directivos y alumnos se encontraron con el mismo panorama.
“En abril un vehículo perdió el control, lo chocó y rompió más de cinco metros. Entonces, con mucho esfuerzo, conseguimos que nos donaran bloques, más los materiales que aportó el Ministerio de Educación y la colaboración de los padres, y logramos arreglarla para la vuelta de las vacaciones. Pero el jueves pasado, nos encontramos con aproximadamente diez metros de medianera en el piso. Y no es que se cayó por el viento, porque se nota que le pegaron fuerte; hasta sacaron los bloques de las vigas que habíamos puesto”, lamentó la vicedirectora, Angélica Olivera.
El muro tiene poco más de un metro de altura y forma parte del cierre perimetral de la institución. Para Olivera, la abertura pone en riesgo a los más de 550 chicos de los tres niveles (jardín, primario y secundario) que asisten todos los días a clases.
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