Con viento a favor, practican kitesurf en el dique San Felipe

El kitesurf es un deporte que se realiza con un paracaídas que se sujeta al cuerpo mediante un arnés y tira del deportista permitiéndole deslizarse sobre el agua mediante una tabla o un esquí. En San Luis  comenzaron a practicarlo en el dique San Felipe. “Firmamos un convenio por dos años con la Asociación Civil San Luis Kitesurf, en el que se impone un plan de trabajos que tienen que realizar para adecuar el terreno. Tendrán que  limpiar la costa, poner alambrados y rampas”, especificó el gerente de Proyectos Especiales, de San Luis Agua, Andrés Dermechkoff, quien agregó que aunque en la provincia es una actividad poco conocida, se realiza en diferentes partes del mundo.

“Este grupo de personas nos acercó la propuesta, pedían un sector del reservorio de agua para practicar el kitesurf, que necesitan hacerlo solamente en lugares donde existe constante viento. Los estudios determinan que para hacer deportes de vela el San Felipe es el adecuado”, dijo el presidente de la sociedad del Estado, Hugo Guzmán Durán.

El espacio cedido mide cuarenta hectáreas y no es utilizado por nadie. La asociación será la encargada de tramitar la habilitación del club, de adecuarlo según las necesidades, de mantenerlo limpio, de poner baños, de crear un acceso y además tendrán que reforestarlo con especies autóctonas. El presidente de la asociación es Gabriel Antonio Novillo Rangone.

“Es interesante porque en ese lugar específico había poco desarrollo. Los chicos están organizados y dicen que es divertido y fácil de hacer. En función de que ellos cumplan con lo que les pedimos, existe la posibilidad de extender el convenio por dos años más. Además, ellos planifican trabajar para poder abrir una escuela de kitesurf y así para el año que viene organizar un campeonato argentino”, afirmó y agregó que esta iniciativa se sumará a las propuestas turísticas de la provincia.

“Para poder practicarlo se necesita una tabla y una especie de paracaídas, que es el que hace que la persona que está sobre el agua, en la tabla, avance y adquiera velocidad. Es importante que la costa tenga unos cien o doscientos metros para desplegar el paracaídas o para frenar, y salir a la pista”, dijo Dermechkoff y aseguró que en las competencias se utiliza una playa de cien metros para que los deportistas salgan en sus corredores.

El gerente de proyectos especiales agregó que el paisaje, que generan los elementos en el aire y en el agua, es muy bonito.

“Actualmente la asociación está integrada por unas veinte personas, más los que se juntan de windsurf, considero que como es nuevo y divertido, el kitesurf tendrá muchos seguidores”, concluyó.