Con el nuevo Código Civil, creció la tendencia de poner nombres raros en San Luis

Germashonny, Edifer, Kelaya y Abdul  fueron algunos de los nombres pocos usuales asentados en el Registro Civil durante el 2015. Esta tendencia, que no es nueva en San Luis, aumentó desde que implementaran el nuevo Código Civil ya que otorgó más libertades. Las preferencias reflejaron, según el organismo, el auge en el país por las novelas turcas.

En total y hasta el 29 de diciembre fueron registrados en San Luis 5.009 bebés, en Villa Mercedes 2.666 y en Merlo 145. En la capital, los nombres de nenas más llamativos fueron Amani, Cesia, Peyton, Hasna y Yailem, los de varones: Tabaré, Dastan, Onur, Izam, Sneider y Jaciel. Los papás de Villa Mercedes son un poco más conservadores, ya que en el Registro sólo figuraron 12  nombres poco usuales: están las pequeñas Kalek, Kihara, Jared, Germashonny y Yessiel; y los pequeños Cyro, Viktor, Giole, Nippur, Burak, Ayax y Tediz. Los merlinos no se quedaron atrás y eligieron para sus niñas Azai, Shanna, Jarai, Arai y Aitana y para sus niños Kenay, Iadel, Sao, Sahir, Jury, Ozias, Toulouse, Berlios, Itaac y Vito.

“El nuevo Código Civil entró en vigencia el 1 de agosto. Calculamos que desde entonces, el número de personas que inscribe a sus hijos con nombres poco comunes se incrementó en un 30 por ciento”, dijo Rita Cussotto Godoy de la dependencia de San Luis. La empleada explicó, que si bien con las nuevas leyes hay menos restricciones, aún quedan limitaciones a la hora de asentar a los niños. Eso pasó en Villa Constitución, una localidad de Santa Fe, cuando el Registro rechazó una solicitud de una pareja que quería ponerle Yerbabrava a su hijo. En Buenos Aires pasó lo mismo con Agua, Pinta y Fox. Sin embargo, antes de la implementación de las leyes algunos organismos de la capital nacional habían aceptado Yuthiel, Sira, Marella, Lain, Hiel, Lirón, Cosentino, Wassib, Ahren, Uziel, Unai y Sur.

Las negativas sólo apuntan a todo lo que dañe o resulte ofensivo, explicó Godoy. “Hay una regla basada en la ley 26.413 del Código actual que estipula que no se puede inscribir al bebé con nombres extravagantes. Están comprendidos en esta categoría  los peyorativos o los que puedan menoscabar el respeto o la dignidad”, afirmó. Los padres tampoco podrán poner más de tres nombres ni primeros motes idénticos a los de sus hermanos vivos. Queda permitida la inscripción a hermanos con el primer prenombre idéntico como por ejemplo María Paula y María Jimena.

Los tradicionales

Por tercer año consecutivo, tanto en San Luis como en Mercedes, Francisco, Francesco y Francesca volvieron a figurar entre los nombres más elegidos. La moda tuvo su inicio después de que asumiera el papado el cardenal argentino Jorge Bergoglio. En Merlo, los nombres más repetidos fueron Bautista y Luana.