Un paso más para aliviar el depósito vehicular del Municipio. En la sesión de las 20, los concejales votarán por un proyecto de ordenanza que busca eliminar los escapes libres o adulterados, la principal razón de los ruidos molestos de la ciudad. Aunque en la actualidad hay 325 caños, la medida abarcará a los que lleven más de treinta días desde el momento de su decomiso.
La nueva normativa facultará al Tribunal Municipal de Faltas a disponer la destrucción de los elementos incautados en los operativos viales y, además, genera al infractor la obligación de abonar las tasas incluidas en el secuestro, de Arrastre y de Estadía de los ciclomotores y cuatriciclos, independientemente de las multas que les apliquen.
También otorga un plazo de cinco días para que el motociclista haga su descargo, que haga uso de su derecho de defensa ante el Tribunal. En el caso que no lo ejerza, que nadie comparezca, empieza a correr el mes para compactar el escape.
"En el 99 por ciento de los casos no comparecen ante el juez. En los controles que detectan el caño adulterado, secuestran el ciclomotor completo y lo llevan al depósito. Para retirarlo tiene que ir con el nuevo reglamentario y dejar el modificado que son los que se acumulan año tras año y hoy hay más de trescientos", señaló Oscar Montero, uno de los ediles de Compromiso Federal.
Según los registros de la Coordinación de Seguridad Vial en 2008, 2009 y 2010 retiraron sesenta escapes, en el 2012 apenas seis, al año siguiente otros cincuenta y siete, en el 2014 secuestraron ciento veinticuatro más y el año pasado desmantelaron cincuenta. Junto con los veintiocho de los primeros meses suman trescientos veinticinco caños adulterados. El único año sin registros es el 2011.
"Empezamos por lo más chico, menos conflictivo y más fácil de solucionar jurídicamente. La jueza (Mónica Fernández) está al tanto porque dialogamos y consensuamos la redacción del proyecto con ella. En la reunión con la comisión de Hacienda y Presupuesto, que está representada por todos los presidentes de los bloques, y les propuse tratarlo sobre tablas porque el proyecto tiene la firma de todos los concejales; para no demorarlo y acortar los tiempos", sostuvo el legislador.
La votación será en la sesión de las 20.
Para Montero, el proyecto abre la posibilidad de empezar a tomar decisiones que también definan el destino de las más de quinientas veinte motos que copan el depósito vehicular municipal (Ver Van por los ciclomotores del galpón). "Trabajamos en darles una solución que viene por ese lado. El escape se compacta y se puede vender como chatarra, aunque no es mucho lo que pueda obtenerse. La idea es terminar con el foco de contaminación que ocasionan en el depósito y mandar un mensaje de lo que se hace con esos objetos que no vuelven al circuito, porque si se hace a la vista de todos y con total transparencia no dejará dudas. Es un mensaje claro a la comunidad y a los que hacen este cambio del escape, que tantos ruidos molestos producen y la inseguridad que provocan a los conductores, porque los rodados adquieren mayor velocidad (con la intervención mecánica)", indicó.
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