Dolores en la cervical, problemas de columna, contracturas en la espalda, en la cadera, son algunos de los malestares que padecen las personas que trabajan muchas horas sentados frente a una computadora. El kinesiólogo, Juan Pablo Gares, aseguró que las malas posturas son adquiridas por posiciones poco ergonómicas causa frecuente de retracciones musculares y disfunciones articulares.
La primera, es el acortamiento específico de un músculo o cadena muscular. Suelen ir acompañados de problemas posturales como la hipercifosis (curvatura dorsal exagerada), hiperlordosis (curvatura lumbar y/o cervical exagerada) o escoliosis (desalineamiento de la columna en el plano anteroposterior). La segunda, refiere a la restricción de los movimientos accesorios, (pequeños deslizamientos y traslaciones), produciendo dolor.
¿Qué grupos musculares afecta?
Gares detalló que el trabajo de oficina tiene características sedentarias. Estas posiciones prolongadas, entre 8 a 10 horas diarias, genera la retracción de: tríceps sural, isquiotibiales, psoas, pectorales, flexores de codo y mano y esternocleidomastoideo. (Ver figura central).
"Nuestra columna vertebral presenta curvaturas fisiológicas para poder soportar cargas y mantener el equilibrio. En estado de sedestación prolongada las mismas se ven modificadas para poder adaptarse a la función solicitada", explicó.
El profesional remarcó que los problemas posturales siempre son globales. "Por ejemplo, un aumento de la lordosis cervical puede comprometer la inervación e irrigación de miembros superiores pudiendo presentar adormecimiento, debilidad, epicondilitis o tenosinovitis", especificó.
Los más comunes
Según los kinesiólogos, los problemas en el cuello y la columna cervical son los que más inconvenientes pueden causar, ya que alteran la circulación y el flujo de sangre hacia el cerebro. Esto puede provocar mareos, dolores de cabeza, zumbido en los oídos, nublado de vista, decaimiento, opresión de pecho, taquicardia, disminución de la memoria o adormecimiento de las manos por la noche.
Cómo prevenirlos
Gares, mencionó que para evitar estos dolores, hay que tener una correcta posición del cuerpo, elementos y mobiliario adecuados; pausas activas de movilidad y elongación cada 2 horas; actividad física como mínimo de tres estímulos semanales de una hora y media que incluya trabajos de flexibilidad; pausas activas de cinco minutos cada dos horas con movilidad cervical y elongación.
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