Tres estudiantes en busca de concientizar a la provincia

“A veces las mismas mujeres tenemos ese machismo integrado. Y eso que hablo de un colegio donde vamos todas chicas”. Guadalupe Saitúa (17), de la escuela Paula Domínguez de Bazán, contó que todavía circulan los mismos “chistes” o frases contra el género femenino de hace por lo menos veinte años. Pero la joven va por el cambio.

Junto a otras cinco chicas, fue becada por Edesal y la Fundación Global para capacitarse en Buenos Aires sobre la “Equidad de Género y Empoderamiento de Jóvenes Líderes”, y realizar actividades públicas para concientizar a la provincia.

“Son becarias del año pasado, que salieron de entre cientos de chicas de 5º año. Ahora ellas siguen trabajando en programas de capacitación sobre la cuestión del género. Mientras, estamos con otra instancia, donde convocamos a más de 150 chicas que tienen que preparar un documento para concientizar. Es decir, tiene que ver con cómo llevar los contenidos sobre la identidad de género a través de una propuesta ingeniosa dirigida a los adolescentes, principalmente”, explicó la vocera de Edesal, Mariela Quiroga Gil.

“El año pasado vi el anuncio en el diario y me anoté. De ahí fuimos pasando las etapas hasta que me avisaron que había sido una de las seleccionadas. Y desde chica me interesaron estos temas, porque veía cómo todo estaba impuesto por la sociedad, incluso temas que eran de otra época, como eso que la mujer tiene que cocinar siempre. Creo que todo esto está cambiando”, dijo Saitúa, quien destacó la educación que le dieron sus padres, por enseñarle a “hacerse respetar, siempre”.

Daniela Escudero (17), del Aleluya, es otra de las alumnas becadas. De su viaje a Buenos Aires, destacó los talleres donde explicaban que la mujer puede ser lo que quiera, sin necesidad de estar atada a ningún mandato.

“Cada vez se ve menos el machismo entre mis amigos, aunque tengo compañeras y amigos que siguen con esos pensamientos del hombre, como rey de la familia, y la mujer debe hacer caso”, dijo Escudero y siguió: “No es que me molesten los chistes, porque sé que no es real. Lo que sí es peligroso, es cuando ya se busca un maltrato, de un lado y del otro. De todas maneras, por ejemplo con el tema de la homosexualidad, cada vez más gente lo acepta. Y está bien, hay que crear conciencia de igualdad en todos los sentidos”.

En el caso de Carolina Suárez (17), del Santa María, el deporte la ayudó a entender que no son el sexo débil, y que incluso ella es más fuerte que muchos varones.

“Siempre escuchaba esto de ‘vos tenés que hacer tal cosa porque sos nena’. Pero no, no es así, porque en el voley, por ejemplo, tenemos un equipo bueno y le podemos ganar hasta a los chicos”, aseguró la joven y agregó sobre la educación de sus padres: “De niña siempre me incentivaron a que haga lo que realmente me guste. Y eso es clave, porque entre los adolescentes pasa de todo: están los que cuentan con el apoyo de su familia, y los que están un poco más solos y terminan burlándose de todo, pero por dentro, sufren”.