Francisco: "Siento dolor y vergüenza"
Se refirió al tema más delicado de su visita. Y se reunió con un grupo de víctimas. Luego encabezó una masiva misa.
El primer día completo del Papa Francisco en Chile estuvo signado por dos hechos importantes. Uno era esperado: la misa en el Parque O'Higgins, en lo que sería el primer contacto masivo con la gente, ya que el paseo en Papamóvil del día anterior fue demasiado raudo y dejó gusto a poco en los que lo esperaron a lo largo de la Alameda, cuando fue rumbo a la Nunciatura Apostólica. Pero el otro mojón de la jornada se dio un rato antes, durante su visita de cortesía al Palacio de La Moneda. Allí, con la presidenta Michelle Bachelet sentada a un costado del estrado, Francisco dijo lo que muchos querían escuchar, pero pocos imaginaron que lo iba a hacer de manera tan directa: pidió perdón por los casos de abusos en los que se vieron involucrados miembros de la Iglesia Católica.
Y hubo más: en una reunión privada, recibió a un grupo de víctimas de esos abusos.
"Siento dolor y vergüenza por el daño que sufrieron muchos niños y que fue provocado por miembros de la Iglesia. Es justo pedir perdón", expresó el Papa en el Palacio Presidencial. Tras un par de segundos de estupor, el auditorio inició un tímido aplauso. La misma reacción se vivió en el Parque O'Higgins, donde la multitud ya lo esperaba hace rato mientras lo veía por las ocho pantallas gigantes instaladas en el predio. Primero un murmullo, y enseguida un aplauso fuerte y cerrado ante la confesión, una de las más esperadas.
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