Merlo refuerza los controles para luchar contra los basurales

El crecimiento de los basurales clandestinos en la ciudad de Merlo es una preocupación constante para el Municipio, que desde hace tiempo trabaja para erradicarlos. Pero la labor no parece terminar, dado que una vez que limpian no pasan pocas horas que estos lugares vuelven a tener residuos. Esta situación motivó a la Intendencia a reforzar su plan de lucha. Por eso habilitó a todos sus inspectores para que tengan la facultad de labrar actas de infracción, si detectan a los vecinos arrojando desperdicios en la vía pública.

El propio intendente “Rody” Flores se mostró muy molesto ante esta situación. “Es incomprensible lo que pasa. Es increíble que se generen basurales cuando tememos un servicio de recolección que funciona bien”, dijo.

El jefe comunal indicó que en el caso del centro y de la Avenida del Sol el basurero pasa todos los días.  En la zona de los barrios el servicio es de lunes a sábado. Señaló que tienen un sistema de recolección diferencial que pasa dos días a la semana para levantar residuos húmedos y secos. “Ver que se siguen generando los basurales la verdad que me molesta mucho, porque les damos todas las condiciones para que la gente no tire basura”, señaló, y agregó que en estos sitios encontraron desde desperdicios de poda hasta televisores viejos, lavarropas, gomas de autos y animales muertos.    

Paula Andreoli, directora de Medioambiente y Saneamiento, comentó que hasta el momento registran entre 15 y 20 sitios donde la gente tira desperdicios, y que se han vuelto crónicos. Aseguró que en muchos casos cuando terminan de limpiar, a las pocas horas vuelven a estar sucios. Esto ocurrió el viernes pasado, cuando el área levantó la basura que se había acumulado en dos sectores del barrio 156 Viviendas. A los pocos minutos, alertados por una denuncia, frenaron el accionar de un vecino que tiró residuos en la cuadra de calle La Corzuela, entre Rodeos de los Cocos y El Piquillín. Los inspectores procedieron a labrar la infracción correspondiente.

En la localidad desde el año pasado está en vigencia la ordenanza municipal 777/17, donde se establece el valor de las multas que deberán pagar las personas que infrinjan la ley al arrojar residuos en la vía pública, espacios verdes, descampados y arroyos, entre otros espacios. 

Quienes incurran en esta falta, deberán pagar una multa que va desde 200 a 1.500 unidades de valor. El monto se calcula según el precio por litro de nafta super, que actualmente supera los 40 pesos.    

La funcionaria dijo que la ayuda que prestan los vecinos que están comprometidos con el cuidado del medio ambiente es fundamental para detener a los infractores. “Lamentablemente siempre llegamos cuando la basura ya fue arrojada y por eso no podemos detectar a quiénes la tiraron. Pedimos la ayuda de la gente que si ve esto lo denuncie inmediatamente,  para así poder labrar el acta correspondiente”, dijo. La denuncia la pueden hacer al teléfono 02656 47-5495.